MI OSCURA TENTACIÓN

184 10 7
                                    

En la mañana antes de salir hacia el aeropuerto me despedí de mis padres prometiéndoles que volvería pronto y que me comunicaría con ellos apenas aterrizara el avión, sinceramente me despedí con algo de nostalgia, al salir de casa arranque el auto y me dirigí a mi destino, un destino que es incierto, pues suelen suceder circunstancias que logran hacer un cambio radical en nuestras vidas cuando menos te lo esperas.

No quise desayunar nada, estaba realmente nerviosa, no cargaba mucho equipaje solo lo relativamente necesario, detestaba andar cargando maletas y todo eso.... Al llegar al aeropuerto me dirigí con mi boleto listo, hacia donde tenía que abordar, se lo entregue a la encargada, no había mucha gente ya que la mayoría se encontraban ingresando al avión desde antes de mi llegada.

Subí al avión cagada de miedo, odiaba volar, de verdad que sí, se escuchaban tantas cosas aterradoras que me provocaban pánico, pero heme aquí viajando hacia Argentina donde mi mejor amiga, todo lo que hago por esa perra que amo.... Me decía a mí misma.

Busqué mi asiento según me indicaron, al hallarlo me senté y luego la voz de una mujer se hizo escuchar por los altavoces dando instrucciones para el viaje. Y ahí fue donde lo vi... Sentada y con el cinturón abrochado esperando el momento del despegue noté un hombre alto, con músculos tonificados, ya que se marcaban excelentemente gracias a su camisa ajustada y con un gran trasero, lo peculiar es que era un tipo muy apuesto y de etnia negra. Este ingresaba de ultimo al avión se notaba agitado, supongo que por la prisa al abordarlo ya que estaba a punto de iniciar el vuelo, las azafatas le guiaron a su asiento y le brindaron las instrucciones debidas.

Extrañamente no podía dejar de verlo, me provocó cierta atracción al mirarlo, y como si de una broma se tratase justo cuando estoy concentrada observándolo cuando este mira hacia mí directamente y percatándose de mi indiscreción él me sonríe tan cautivadoramente que me provoca un escalofrío el cual me recorre desde la cabeza hasta la punta de los pies, haciendo que me altere y me avergüence en seguida y por ende aparto mi vista sintiéndome completamente apenada y sonrojada. 

Maldición pensé, pues nunca esto me había pasado con nadie.
Durante el viaje me obligue a no voltear a verlo, era una tentación enorme el hacerlo, pero me esforzaba con toda mi fuerza de voluntad en no dirigir la mirada hacia aquel hombre negro, atractivo, cautivador, sexy.

Así decidí colócame mis audífonos y escuchar música, All Hope is Gone de Slipknot fue la primera en reproducirse con el volumen al máximo, tenía los ojos cerrados relajándome e intentando porque no, dormir un poco.

Desperté abriendo mis ojos lentamente, para llevarme la sorpresa que por poco me provoca un infarto, él se encontraba justo frente a mí, sonriendo, maldita sea, sí que poseía una belleza inusual, haciéndolo aún más irresistible; tengo que reconocer que me estaba volviendo loca y de pronto me descubrí fantaseando con él, por lo que me sobresalte al darme cuenta lo cerca que estábamos.

En breve me explicó que le cambiaron de lugar porque no sé, ni atención le puse, estaba tan concentrada en sus labios, en su aroma, en su voz, en su mirada, en su todo... Sus ojos miel, su piel chocolate, sus labios gruesos y carnosos, fijo ya había perdido la cordura por un extraño, en un avión, con el que deseaba que se encontrara entre mis piernas haciéndome suya, ¡joder!, debo controlar mis pensamientos.

Su nombre, Enyr, un tipo carismático con personalidad realmente agradable, luego de que obtuviera mi autocontrol y calma entablamos conversación y se puede decir que hasta una ligera amistad... Su mirada me decía algo a gritos, pero no supe interpretar qué o quizá no lo quería reconocer.

Paso el tiempo y ya estábamos por llegar, todos listos para el aterrizaje, se suponía que Mariam me esperaría en el aeropuerto, me encontraba feliz, todo había salido muy bien, el viaje fue toda una aventura, tenía su número y él el mío, juramos que nos volveríamos a ver, si estoy loca, pero yo sinceramente deseaba ver pronto a mi oscura tentación, oh sí que ¡sí!.

Enyr al despedirse me dio un beso en la boca, siiii en la boca, casi dejándome sin respiración, era un experto en la materia y no pude contener el pensamiento de preguntarme como será en la cama, pero todo eso lo dejé de lado al ver como ese hombre se marchaba perdiéndose entre las demás personas.

Mariam vio la acción del beso y luego de recibirme gritando como loca, además de abrazarme miles de veces, no tardo en bombardearme con preguntas respecto al bombón que me hizo perder la cabeza a miles de kilómetros sobre la tierra.

El tiempo con ella pasaba rápido, llame a mis padres al llegar a su casa, nos cambiamos y preparamos para una fiesta, sería un día largoooo, amaba pasar mi tiempo con ella, no importaba la distancia, éramos mejores amigas, siempre estábamos la una para la otra, nos visitábamos cada que podíamos y siempre en contacto por redes sociales.

Ella conducía, nos encontramos frente a una mansión, bajamos del auto y caminamos hacia la entrada, yo llevaba un vestido blanco, cuello v dejando a la vista mi gran escote, pero no me preocupaba total casi no tenía senos, la espalda abierta y este tenía un largo que con costos tapaba mi trasero, era muy corto, tacones rojos y un maquillaje de rímel, delineador negro junto con labial rojo puta como dijo mi amiga.

Mi cabello castaño largo y ondulado iba suelto como de costumbre, caminábamos con nuestros brazos enlazados, ingresamos y nos recibieron amablemente, la música retumbaba en la casa además de olor a licor y drogas especialmente marihuana, mi amiga y yo nos dirigimos al bar y pedimos dos tragos, tequila algo suavecito para comenzar, lo tragamos y luego nos dirigimos a la pista, ambas bailábamos y se puede decir que de la forma en que lo hacíamos parecíamos lesbianas, pero que nos importa, muchos hombres nos miraban notándose la lujuria en sus miradas, muchos se nos acercaron para invitarnos a bailar, pero rechazábamos diciendo que era noche de mejores amigas.

Al cabo de bailar por mucho tiempo dos chicos caminaban hacia nosotras, vestían de negro, se veían guapísimos y al distinguir a uno de ellos mi corazón dio un brinco. Se trataba de Enyr, llegaron a nosotras, Mariam se sorprendió al verlo pues igual sabia mi historia, aunque se hizo la loca, él nos saludó amablemente y me presentó a su amigo Mikah, le comentamos que nos conocíamos y fue divertido. Nos habló que Enyr estaba algo similar a mí con su visita Argentina...

MI OSCURA TENTACIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora