Te vi,
Para mis ojos destacabas entre la multitud
Me acerqué y deje mis labios acariciar tu mejilla
Me acerqué natural, sin demostrar que temblaba
Cual hojilla que teme caer por el viento.
Involuntaria mi mano acaricia tu cabello
Involuntaria me pierdo en tus ojos
Y me permito no pensar en el último tiempo,
En tu silencio, en tu ignorancia de mi,
En todo ese espacio vacío que se coló entre ambas...
Me preguntas cómo Me encuentro,
Te miro y recuerdo tu sonrisa;
-Estoy bien- (¿cómo sino debería estar?)
La trivialidad de dos simples conocidos evita el silencio
Olvidamos como preguntar lo esencial, lo verdadero.
Y aún así, esta conversación tan simple me confunde
Como tambalear de ebrio (no se cuando voy a caer).
Ambas queremos alargar este momento
Aunque ya no es lo mismo, no es igual,
No es como en los recuerdos.
Tu te vas y yo tomo otro camino
¿Nuestras direcciones algún día volverán a coincidir?
¿Volveré a sentir tu aroma en un abrazo?
¿Volverás a tomar mi mano y contemplarla junto a la tuya?
Y aunque estas preguntas tal vez sean un imposible
Una tortura innecesaria, un autoflajelo por lo que fuimos
Mi mente no las puede evitar formular;
¿Volveré a ser tu último mensaje y el primero al abrir tus ojos?
¿Volverás a no poder imaginarte un sin mi?
¿Seguiré siendo una de las personas más importantes de tu mundo?
Y por hacerlo finito
¿Aún arriesgarias tu vida por mi, sin pensarlo un segundo?
