Capítulo 7:

159 6 0
                                    

Era sábado y mi alarma sonó pronto, para ser exactos a las 11:30. Cuando me despertaba no volvía a dormirme al menos que tuviera mucho sueño y ese sábado no era uno de esos. Así que me levanté y me puse a ver fotos desde mi móvil, allí guardaba fotos que me había sacado en España con mis amigos y amigas, al recordar cada momento me puse a llorar (no sé si ya lo había dicho antes pero cuando mi madre empezó a tener dinero me cambió el móvil por un Iphone y ella se quedo con el mío). En ese instante entró mi madre

- ¿qué haces tan pronto despierta?

- no puedo dormir ya sabes como soy

- sí, lo sé cielo. Se fue de nuevo.

Yo me vestí, cogí del armario una beisbolera que me habría comprado en España en la tienda de H&M recordaba ese día como si hubiera sido ayer. Era un miércoles como otro cualquiera y mi madre nos vino a recoger al Príncipe (el Príncipe era un centro de menores donde había estado desde los 9 a los 17 años antes de mudarme aquí, a Londres. En ese centro había dejado a mis amigos y amigas más especiales con las que poco a poco volvía a contactar con ellas mediante una cosa u otra) a buscarnos a mi hermana y a mí y nos fuimos a comprar ropa yo estaba empeñada en comprarla y al final me la compré. Los minutos pasaban y yo seguía cavilando en mis cosas, tenía hambre así que baje abajo y fui a la cocina. Al llegar allí me preparé mi desayuno y desayuné. Subí de nuevo y ya era la 13:30 y pensé en llamar a mi amigo Nate pero pronto lo descarté pensaba ¿Y si le molesto? ¿Y si se olvidó de mí? ¿Y si está durmiendo? ¿Y si no quiere saber nada de mí? Mientras estaba en mi mundo sumergida un sonido familiar empezó a sonar en mi habitación. Era mi móvil que estaba recibiendo una llamada, veo de quien se trata y me doy cuenta que justo es de quien estaba pensando en ese momento cojo el teléfono. CONVERSACIÓN:

- Hola -dije

- Hola

- ¿Como estas?

- Bien ¿y tú?

- Yo bien ¿Qué es de tu vida?

- Pues nada aquí en Londres centrándome en mis estudios ¿Y la tuya?

- Bien en Pamplona como siempre, pero ¿Y tú qué haces en Londres?

- Una historia muy larga de contar el resumen es que mi madre no encontraba trabajo por ahí y decidió venirse para aquí y ya estamos desde hace 1 mes o más aquí

- Que bien -dijo- ¿y qué tal llevas el cambio?

- Lo voy llevando bien he estado pensándolo y me propuse seguir estudiando, osea, que estoy estudiando 1º de bachillerato por letras y me va muy bien en la primera evaluación aunque llegue un poco tarde por la mudanza y todo me he puesto las pilas pidiendo apuntes anteriores a una amiga y me he adaptado y conseguí aprobar todas. Ahora que ya volvimos con la segunda evaluación me estoy esforzando más.

- Me alegro de que sigas estudiando y no hicieras como yo

- Otra vez con el tema de cómo tú ya te había dicho que yo estoy orgullosa de ti hayas dejado de estudiar o no que sepas que eres un chico majo no lo siguiente que lo da todo por los demás puede que a veces te canses del comportamiento que recibes a cambio pero yo sigo orgullosa de ti porque te dedicas a algo que en realidad te gusta que en este caso es la música.

- Gracias Bea -dijo, creo que necesitaba recordar lo que la gente como tú lo aprecia y yo estoy aquí para él aunque -hace poco que le conozco bueno no tan poco hizo 7 meses para ser exactos el 19 de Febrero de 2014, es decir, que ya le conocía muy bien y él sabía que yo le había cogido cariño -oye sigues ahí

- Si perdón estaba pensando, de nada, ya sabes que me tienes aquí para cualquier cosa que necesites

- Si lo sé no te preocupes oye ¿Y cómo es Londres?

- Para mí es una ciudad preciosa pero he visto muy poco, a ver si mi madre se anima a conocer algo más de este pequeño paraíso o si no me voy con Emily

- ¿Quién es Emily? -Preguntó intrigado

- Es mi vecina y compañera de mesa en clase; es muy maja y ella es de aquí

- Entiendo -dijo- ¿Y qué sabes de one direction?

- Pues no mucho que iré a verlos aquí el 6 de junio

- Me alegro, yo sigo aquí sin poder ir. Ya sabes como estamos en mi casa -tenía que dejar de hablar con mi amigo aun que no quisiera y me despedí

- Nate, cielo, tengo que colgarte que mi madre me llama desde abajo que me necesita. Otro día me llamas o te llamo otro día te quiero hablamos

- Okey, Bea, hablamos y yo a ti chao

- Chao

Colgamos el teléfono y baje abajo, mi madre quería que ayudará a mi hermana con la compra que saldríamos ella y yo en 10 minutos. Ese tiempo pasó y yo decidí llevarme algo de mis ahorros por si al llegar a la tienda me apetecía algún capricho como chocolate o algo. En todo el tiempo que llevaba perdido 7 kilos desde entonces me sentía mejor y mi progreso continuaba. Llegamos a la tienda y cuando estábamos comprando una de las cosas que había en la lista que mi madre había escrito mi teléfono sonó. Cogí y era Miguel un amigo al que conocí hacia mucho tiempo y quería con locura.

CONVERSACIÓN:

- Hola Bea - dijo

- Hola Migui

- ¿Puedes quedar mañana?

- Siendo sincera no

- ¿Por qué?

- Pues porque ya no estoy por ahí

- Entonces ¿Dónde estás?

- Pues estoy en Londres ahora mismo en la tienda comprando cosas -en ese instante vi algo que me apetecía, chocolate.

- Oh que bien me alegro bueno pues te dejo comprando otro día hablamos

- Claro chao te quiero

- Y yo

- Besos.

Y colgué el teléfono. Busqué a mi hermana estaba cerca y nos dispusimos a pagar lo que había comprado. Al llegar a casa mi teléfono sonó

- Hola ¿quién es? - dije

TODO CAMBIO GRACIAS A ELLOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora