Ya no está

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Llegue a mi casa como siempre lo hago, deje mi mochila sobre mi cama y fui corriendo a acariciar a mi gatita "yibu". Ella ya estaba viejita y yo sabia que no iba a durar mucho más, pero cuando llegue a su cama que le habiamos compra que no estuviera tan incómoda, mi sorpresa fue de verla acostada con los ojos abiertos y tan brillantes como nunca, pensé que reaccionaria al escuchar mi voz pero eso no paso, pues ella había fallecido. 
Lo primero que sentí fue mucho dolor y tristeza, aunque en frente de mi madre me hacia la fuerte. Extrañaba tanto y solo habían pasado unas horas de la ultima vez que la vi, me acordé del momento en el que mi abuelo me la regalo, yo solo tenia dos años y el ya estaba por viejito así que me dijo "no falta mucho para que yo me vaya, asi que quiero dejarte este regalo para que nunca te olvides que te quiero y que siempre te voy a cuidar desde el cielo". Yo era muy pequeña y no entendía mucho, pero recuerdo que ese fue el día más feliz de mi vida tenía una mascota, mi mascota y nadie nunca  nos iba a separar.     
Pero de un abrir y cerrar de ojos ella se fue, yo se que es mejor que descanse en paz antes de que sufra, pero yo la voy a extrañar siempre, cada segundo que pase porque no sólo fue el último regalo de mi abuelo, si no la que me acompañó durante 11 largos años de mi vida, los mejores 11 años.   
Me hace mucha falta, extraño que ella fuera a mi cama todas las noches para dormir enzima mío o bajo mis frazadas, que cuando comiera siempre quisiera sacarme algo del plato, sentir su ronroneo constante sobre mi pecho, y así extraño muchísimas otras cosas básicamente la extraño a ella. 

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