Cuando la lluvia cae y la miro por las ventanas de mi cuarto, ansío saber que será tocar la lluvia, sentir el cesped entre mis pies, y correr entre los arboles del bosque que se nota allá a lo lejos.
Podría escalar aquella montaña? podría atrapar la ardilla que acabe de mirarme y huyó? Cómo serán los prados ? Realmente no lo se, desde que nací jamas he salido de esta casa de madera con grandes ventanas, y jamás algo ha entrado, a excepción de mi madre que cada dia trae alimento y agua. No se mucho del mundo, en estos muros es difícil saberlo, pero mamá dice que no es tan grande, y que no hay mucho más allá de las montañas. Por lo general ella solo sale una vez a la semana por el alimento y no vuelve a salir, nos quedamos en casa, leyendo libros, sintiendo el calor de la chimenea de vez en cuando, jugando con alguno pedazos de madera y hojas que me encuentro regadas.
Mamá es muy tranquila, por lo general le gusta quedarse sentada en una mecedora viendo por las ventanas de el cuarto principal. La casa es pequeña, solo 3 recamaras muy acogedoras, una para las camas, otra para jugar y otra más para estar. Había contado 1523 lunas el día de ayer desde que nací, bueno, mamá dice que han pasado 1523 aunque yo creo que son más, y desde que tengo memoria la única regla que hay en casa es "No saldras de esta casa, ni dejaras entrar a alguien que no sea yo" eso dijo mamá. Nunca se han presentado esas situaciones, me gusta este lugar, y nadie suele pasar por aquí.
Un día mamá como de costumbre salió por comida con su morral y vestido blanco.
Y yo como de costumbre comence a esperar mientras veia por la ventana.
Hasta que alguien toco a la puerta.
*Toc, toc*
-Hay alguien dentro?...
*toc toc toc*
-Hola?
Los golpes fueron aún más fuertes.
*Toc toc toc toc*
-Hola!?
Hasta que decidí contestar.
-Si?
-Hola, disculpa, crees que pueda entrar ?
-Por qué quieres entrar?
-Está comenzando a llover, y se está tornando fresco, puedo pasar?
-Bueno... y que eres?
-Que soy? pues una niña, creo...
-Que es una niña?
-Es una persona ,como una mujer pero pequeña.
Pensé en si debía dejarla entrar, el clima se estaba tornando algo fresco y cada vez caía más lluvia. No se lo que signifique eso, pero esa "niña" sonaba asustada. Recordaba bien lo que dijo mamá, pero podría ser una oportunidad para saber que hay allá fuera pero de cerca, algo más, solo conocer un poco más.
Abrí la puerta.
-Hola, gracias por dejarme entrar.
-...
-Como te llamas?
-...
-Te sucede algo?
-N-no
-oh, entonces, como te llamas?
-Llamo?
-Si, tu nombre, cuál es?
-Hijo?
-Hijo? ese no es un nombre, te llamaré Lamb.
-Lamb?
-Si, yo me llamo Erika , pero llamame Eril.
-Eril?
-Si, un gusto, Lamb!
Realmente no comprendía que pasaba, que era eso de nombres y por qué hablaba tanto? Quién era esa "niña"?-Vaya Lamb, tu casa es pequeña pero en serio linda.
-Si?
-Si!
-Ah.
-Que sucede? no hablas mucho?
-No... no lo se.
-Como no lo sabes?
-No lo se, quién eres?
-Eril, tu amiga, Lamb.
-Amiga?
-Si, es... no sabes que es?
-No... no se nada de lo que hablas.
-amiga es... pues alguien a quien quieres mucho y proteges y te gusta estar mucho tiempo con esa persona.
-oh... madre?
-Si, tu mamá puede ser una gran amiga, tienes una no?
-Si
-nuestras mamás son grandes amigas, jamás fallan y nos quieren muchísimo Lamb, y siempre están con nosotros!
-Si...
No entendía muy bien lo que decía , hay alguien que me pueda querer además de mi madre?
-Y tu y yo somos amigos!
-amigos?
-Si!
-Eso suena... muy bien!
No comprendía, pero Eril me hacía sentir bien, como lleno de energia y algo más dentro de mi.
Pasó una hora, la lluvia cesó y el viento calmó.
-Vamos Lamb!
-A donde?
-A fuera!
Salimos... salí por primera vez, habia un poco de sol entre las nubes cayendo sobre mi, sentía el viento por todo mi cuerpo rodeandome y empujandome de un lado a otro, el pasto debajo de mis pies y frente a mi un gran campo verde de césped que jamás supe lo suave que era.
Era tan... maravilloso.
-Corramos Lamb!
-como es eso?
-Tu solo mueve los pies muy rápido.
Movi los pies muy rápido sobre mi.
-No tonto, hacia enfrente.
-Oh.
Rapidamente comencé a moverlos hacia enfrente, y sentí más viento, y más césped,y me gustó. Me sentí acelerado, emocionado, como cuando mamá me traia un juguete pero mejor, comencé a sentirme como mamá me decía que era para ella, me sentía especial.
-Alcanzame Lamb!
-Eril!
Comenzamos a correr y reirnos entre los campos verdes.
Comenzamos a sujetarnos y tomarnos de las manos dando vueltad, jugabamos, eso decía ella.
Acabamos en el suelo.
-Es hermoso.
-Si.
-Lamb.
-Hm?
-Eres mi amigo, sabes? los amigos se quieren, se cuidan, se preocupan, y lo más importante, están juntos siempre.
-Oh... tu también eres mi amiga, Eril.
Surgían cosas dentro de mi pecho que no entendía pero se sentían también como este dia, se sentían tan bien como el cesped y el sonido de las aves, como ver lo grande que es todo desde fuera, eso se sentía, y Eril había hecho todo eso en mi pecho.Al comenzar a atardecer volvimos a casa, pasamos el dia jugando, corriendo más que nada, aprendí que habia algo quw llaman animales y habia un lugar con mucha agua junta, tanta que me cubría el cuerpo entero, fue grandioso! Deseaba repetir este día una y otra vez, tantas veces como el número de lunas que habia vivido y deseaba...
-Lamb...
-Eh?
Escuche a Eril caer detras de mi.
-Eril!
-Lamb, perdona por irme.
-Qué?
-perdona que haya sido tan poco el tiempo que te conocí...
-De que estás hablando? mañana...
-No habra mañana para mi, Lamb. Perdona que te deje, pero hoy era mi último día, era el último que quedaba y decidí venir a este bosque...
-Bosque? Eril, no te entiendo, levantate, me estás asustando.
Estaba entre mis brazos recargada, tosiendo entre palabras.
-Lamb, te quiero, siempre seremos amigos...
Cerro los ojos, y ya no respiraba.
-Eril, estás bien?
No entendí que sucedía, su cuerpo dejo de moverse, estaba frío, no me hablaba, no nada.
-Eril... despierta! despierta ! despierta!
No lo hacía, ella ya no me quería? era eso?
Mis ojos comenzaron a empaparse, porque brotaba agua de mis ojos? por que habia vacío dentro de mi si todo mi cuerpo estaba bien? no entendía nada...
-ERIL! Abre los ojos! Abre los ojos por favor! No se que pasa pero me estás asuatando, asi que abrelos por que no voy a dejarte aqui!Lamb se quedo llorando por mucho tiempo ahí, tomado de la mano de Eril, pues eso era un amigo según aquellos niños, él la cuidaria hasta que todo estuviera bien, pero ellos sentían algo más que querer, y no era esa palabra mundana que le dicen "amar", era algo diferente, delgado como un hilo, curiosamente, pero fuerte como ningún otra cosa. Pero ella había dormido para no despertar, así como él ,aferrado a ella , no la solto y cerro los ojos para no volver a abrirlos.
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Pequeñas cartas de amor
Short Story"Un hilo rojo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse sin importar el tiempo, lugar o circunstancias. El hilo se puede estirar, contraer o enredar pero nunca se romperá" En este mundo todos tenemos un destino, no existe una l...