Inmortalidad Maldita

            Aquí, en el 3053, en donde el futuro es tan real. Donde todo debería ser genial, sin mas enfermedades ni muertes, no mas guerras ni contaminación. Todo eso ha terminado, nada mas a quedado por aprender de la vida, la vida se ha hecho eterna, superflua. Ya no hay nada a que temer, aquí todo es tan simple, tan fácil y justo. Dios nos ha encerrado aquí, nos ha privado de nuestra libertad, de nuestro derecho a saber más.

            Ahora nosotros pasamos nuestros días mirando el ayer, admirando a los héroes caídos que pueden al fin descansar en paz, ir mas allá, volar en el eterno espacio del tiempo. La inmortalidad hizo que olvidemos la razón por la que estamos aquí ¿Por qué? Es una revelación que jamas será contada en este lúgubre lugar al que llamamos tierra, no hay opción en este encierro mas que rogar, rogar por respuestas.

             Por favor dime, dime a donde vamos ¡Dios, tu no necesitas mentir! Por favor mírame a los ojos y dime al menos que es el amor. Ya no puedo recordarlo, mi corazón se ha hecho débil, a perdido la función para el cual fue creado. Quizás deba olvidar todo esto y seguir a la eternidad, seguirla hasta que alguien se apiade de mi y me ofrezca respuestas. ¿Dios? ¿El universo? ¿El cosmos? En un circulo vicioso en el cual las respuestas nunca llegaran y la incertidumbre corroera mi mente inmortal.

          Aquí, en el 3053 todos hemos perdido la fe, ya nada me importa. A mí ni a nadie. Gozo, felicidad, amor y odio son sentimientos que jamas pude saborear. Aquí ya no hay nada para nosotros mas que solo pedir por nuestra muerte, por nuestras añoradas respuestas a preguntas olvidadas. Nuestro derecho a saber, nuestro destino, nuestro propósito en el universo. Ahora solo estamos aquí y aquí estaremos hasta que alguien decida que el tiempo de las respuestas ha llegado, mientras tanto seguiremos admirando a los héroes caídos que pueden al fin descansar en paz, ir mas allá, volar en el eterno espacio del tiempo aprendiendo los secretos que nos han sido negados, quizás para siempre. Pero aun así me pregunto ¿Qué es el amor?

Milton Eloy Govaert (Alecto)