Zhenya
Mi mayor error fue haber salido esa noche debí negarme y quedarme en mi casa leyendo libros o haciendo otra cosa con mi madre, yo no era una chica de salir a fiestas.
Me había metido en un problema bien serio, no sabía como me salvaría por q...
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Zhenya
Sabía que no era bueno venir a esta fiesta típica llena de gentes drogadas y alcohol por todos los lados, no era una persona de estar en lugares como estos, era más de estar acostada en mi cama leyendo un buen libro o mirando una que otra película.
Pero tengo una mejor amiga que se podría decir que me había obligado a venir a este lugar horrendo y preguntaran ¿por que no solamente te negaste? Simple, la semana pasada ella estaba en una fiesta a esos de las 3 de la mañana, recibí una llamada de unos tipos diciendo que vengan a buscar a mi amiga que estaba tirada en una esquina de la casa donde estaba la gran fiesta, sin que se diera cuenta mi madre, encendí su auto y rápidamente me dirige hacia allá con el desastre que tenía un polo grande y unos pantalones de cuadros que consistían en mi típica piyama.
Ni me había dado cuenta como estacioné el auto solo se salí disparada hacia allá adentro donde se escuchaba fuertemente the weekend-starboy y wao valla desastre me encontré, personas drogadas, otras teniendo sexo con ropa por un lado y localize a lya vomitando en una esquina del mueble.
La cargué con ayuda de un chico que una que otra vez lo había visto en la escuela y lleve a lya a mi casa, sin hacer ruido la acosté a un lado de mi cama.
Al otro día no soltaba reproches hacia ella por la falta de seguridad que tenía, ella tenía que cuidarse por que algo le pudo haber pasado y está solo se quejaba de una migraña por el alcohol.
Y aquí estoy en una fiesta en un club, lya me obligo a venir para que yo disfrutará este ambiente y también vine para que no se propasará vasos.
Iban hacer las una de la madrugada, ya era tarde bastante tarde para mi, me levanto del sillón y estiro mi vestido rojo hacia abajo, era demasiado apretado para mi gusto y ni decir de los tacones cremas, aunque yo soy de una estatura baja no podía casi caminar en estos monstruos con le decías pero lya aplico que no podía andar por ahí vistiendo con suertes grandes y vans.
-¿Ya te vas?- pregunto Damien un compañero de biología que se sentando conmigo desde hace dos horas a conversar alguna que otra cosa.
-Si, no vemos en la escuela - le digo cerca de su oído por la fuerte música.
Antes de irme vi como este me giño un ojo mientras me sonreía, sentí mis mejillas calentarse y caminé hacia lya que se encontraba bailando con un chico de ojos azules.
La agarró del antebrazo y le hago una seña señalando hacia la salida, esta solo rodó los ojos, le había arruinado el polvo de la noche.
-Me tengo que ir guapo, pero tienes mi numero... llámame- lya lo besa, no mejor dicho se lo come y aquel chico solo abaja sus manos hacia sus nalgas y las apretabas.
