Star Wars:Fuerza Infinita

Capítulo 5

-¡Arriba las manos!-le gritó uno de los soldados.

Barriss obedeció, llevó las manos en alto y permaneció muy quieta.

Detrás de los clones podía ver como Ahsoka esquivaba a Plo Koon, pero él continuaba cortándole el paso a la nave.

Barriss apartó la vista,decidida a preocuparse primero de su problema.

"Si me cogen,me matan", y era tan egoísta que no pensaba permitirlo.

No podía influir en la mente de todos ellos con la Fuerza,así que decidió utilizarla para otra cosa.

Dio un empujón inesperado,que hizo que diez soldados callesen unos sobre otros,pero enseguida comenzaron a disparar.

Barriss giró y dió volteretas y saltos mortales,con la mochila cargada dándole dolorosos tirones en la espalda.

Pegó un salto y se encaramó al techo de un edificio bajo,donde corrió por las tejas sintiendo como éstas saltaban a sus pies a cada paso.

Le estaban disparando.

Un error y moriría de un disparo de bláster.

" Piensa ,vamos, Barriss..."

Nunca fue la más fuerte.
Ni la más rápida.
Ni la más ágil.

Pero Barriss Offee era muy inteligente.

Y el pánico no la bloqueaba.

La despertaba.

El tejado estaba a punto de acabarse,en unos segundos tendría que saltar...y sabía adónde hacerlo.

Saltó.

Dio una voltereta en el aire ,y acabó detrás de un clon,al que antes de que se girarse,tocó en el centro de la armadura,y éste se desplomó.

Rápidamente sujetó el pesado cuerpo desmayado y lo utilizó a modo de escudo mientras disparaba contra el resto de los soldados,quienes no se atrevían a dañarle por temor a fallar y matar a su hermano.

Barriss fue retrocediendo y logró subir a la rampa de la nave,en la cuál se despojó del soldado y lo despojó a él de su munición.

-¡Ahsoka!-la llamó en la distancia sin dejar de disparar.-¡Ahsoka,tenemos que irnos!

Ella la oyó, estaba segura. Pero no podía escapar de su duelo con Plo Koon.

Barriss subió del todo la plataforma, entró en la nave,y la cerró enseguida.

Luego,corrió hasta la cabina de pilotaje y activó el piloto automático,mientras agarraba los controles de los disparadores y los accionaba, enfrentándose a los clones.

La nave comenzaba a ascender...y Ahsoka no estaba a bordo...

Desde aquella distancia, los clones ya no suponían una amenaza...pero Ahsoka continuaba ahí abajo.

"¿Que hago?"

Y ,de repente, notó unos golpes en el techo de la nave,y a través de la escotilla pudo ver a Ahsoka,con los sables láser aun encendidos.

Barriss abrió la escotilla, y escuchó como caía desde la cabina del piloto.

Barris tomó el control de la nave, y salió al espacio.

Pero una nave de la República las esperaba.

El Decidido.

La nave de Skywalker

"¡No!",pensó Barris.No tendrían manera de escapar.

-Vira a la izquierda-dijo la débil voz de Ahsoka. Ella se sentó a su lado, pero Barriss no la miró.

Hizo lo que decía.

Viró... Y Barriss vio un hueco libre,por el que se coló... Y saltó al hiperespacio.

Jadeando, se recostó en el asiento y preguntó:

-¿Adónde nos has traído?

-A...a...

Barriss la miró.

La sangre empapaba su costado izquierdo.

-Ahsoka...

Ella tosió, y puso una mueca de dolor al sacudirsele la herida.

Barriss no perdió tiempo,la cogió en brazos y la llevó hasta la sala médica, donde le arrancó la ropa y le dejó al descubierto la herida.
Estaba a la altura de las costillas,y seguramente habrían dañado ligeramente un pulmón, debido a que se veía el hueso.

Barriss sabía lo que tenía que hacer;había visto heridas como esas antes, pero no había tiempo de aplicar anestesia.
Se inclinó al rostro de Ahsoka y le susurró:

-Escucha, sé como curarte,pero esto te va a doler muchísimo. Pero tan solo será un momento, te lo prometo.Se acabará en un momento.

Ahsoka gimió a modo de respuesta.

Barriss colocó la palma de su mano a tan solo unos centímetros de la herida de Ahsoka. Concentró todo su ser en ella...y sintió manar la Fuerza a través suyo...sintió como ella misma se transportaba a un mundo oscuro,pero luminoso...un mundo que siempre estaba ahí para recibirla cuando combatía contra el Lado Oscuro y necesitaba escapar de la Luz.

Cerró los ojos.

No existió entonces nada más que su mano,recomponiendo los huesos y tejidos de Ahsoka.

A miles de años luz,la oyó gritar de dolor.

Trató de acelerar el proceso,y el dolor fue haciéndose más intenso...

"No puedo parar", se dijo.

La herida estaba a medio cerrar.

Si se detenía,Ahsoka moriría.

Más dolor.Más dolor.

Un dolor insoportable...que también la alcanzó a ella.

Y,de repente,todo acabó.