Autoestima - Miraculous Ladybug (Adrinette)

Capítulo 1

Marinette ya estaba preparada para ir al colegio, había madrugado y curiosamente para ser lunes se sentía contenta y con ganas de empezar el día. Al bajar las escaleras encontró a su padre acomodando unas cajas.

- Buenos días papá - se acerco a darle un beso - me voy ya.

- Buenos días Marinette, que tengas un buen día. - respondió sonriendo.

En la tienda vio a su madre terminando de atender a un cliente.

- Buenos días mamá. - al igual que a su padre la saludo con un beso.

- Buenos días Marinette, has madrugado. - dijo acariciando su mejilla.

- Si, no sé porque pero me apetecía levantarme temprano.

- Buenos días Marinette. - dijo una voz desde el otro lado del mostrador.

- ¿Eh?. - se giro hacia la persona que la había saludado - ¿Juleka? - dijo con sorpresa, al darse cuenta de su compañera - buenos días, ¿que haces aquí? - pregunto intrigada.

- He venido a comprar unos chocolates. - levanto la caja con una sonrisa.

- ¿Vas ya para el colegio? - pregunto a la azabache.

- Si, salía ahora para allá.

- Genial, podemos ir juntas.

Las dos chicas se despidieron de Sabine y salieron rumbo al colegio.

Durante el trayecto hablaron de cómo había sido su fin de semana, al llegar al colegio vieron a Alya concentrada en su teléfono y caminaron hasta ella.

- Buenos días Alya. - sonrió Marinette.

- ¿Eh? - levanto la vista del teléfono - ¡¿Marinette?!, ¿que haces aquí tan temprano? , ¿está todo bien? - preguntaba sorprendida.

Juleka y Marinette se reían del asombro de su amiga.

- No paso nada, simplemente hoy quise madrugar.

- Buenos días Alya. - Juleka por fin pudo saludar a su amiga.

- Buenos días Juleka, ¿como es que vienen juntas?. - Alya había entrando en modo reportera y le resultaba curioso ver a Marinette llegar temprano y acompañada de Juleka.

- Fui a comprar a la panadería de Marinette. - sonrió enseñando la caja.

- Ya veo y... ¿celebras algo? - seguía con las preguntas ya que hasta donde sabia hoy no era el cumpleaños de ninguno de sus compañeros y le intrigaba saber para qué o para quien era la caja.

- No, no es para una celebración...es un regalo. - esto último lo dijo en un tono más bajo de voz.

"¡AJA!", pensó la morena ahí estaba su respuesta ahora solo necesita saber para quien era y por qué. Le encantaba esto, indagar hasta lo más nimio para esclarecer las cosas, aunque estas fueran triviales o sin importancia.

- ¿Ah sí?. - pregunto curiosa, se acerco más a ella y casi en un susurro pregunto - ¿para quién?.

Marinette veía divertida y al mismo tiempo desconcertante la actitud de su mejor amiga, "¿por qué la insistencia de Alya con la caja de Juleka?", pensaba.

Juleka se tenso un poco ante la pregunta de Alya ya que la tomo por sorpresa, pero con más tranquilidad le respondió. - Son para Adrien.

- ¡¿QUE?! - exclamo Marinette.

Juleka y Alya miraban sorprendidas a la azabache así como toda aquella persona que estaba cerca, ya que el grito de la chica fue notorio.

- Son para Adrien. - volvió a responder mirando confundida a Marinette.