¿destino o casualidad?

un evento inesperado

narra elizabeth
Yo estaba en ropa interior y de repente siento que alguien me miraba, me di vuelta y vi que alexander estaba mirando.
-ehh.... perdón... yo... pen...se.... que.... esta... bas.... lista...-dice nervioso y sonrojado.

-Tranquilo, enseguida estoy lista-digo nerviosa.

-Ems.... esta bien... que lindo cuerpo tienes-dice ruborizado.

-umm.... gracias... -logro decir, muy nerviosa.

Alexander se me acerca lentamente. Yo no me podía mover de tantos nervios.

-sabes... desde el primer día quería hacer esto- me abraza de la cintura y me acerca a el quedando a centímetros de su boca.

-¿que cosa?-pregunto sonrojada.

-esto-

Me vuelve a besar y no lo evito, aquel tierno beso se volvió un beso lleno de pasión y lujuria, solo pensaba solo pensaba en que me hiciera suya, y en aquel momento me tenia tumbada en la cama, me besaba y acariciaba, y de repente se separo de mis labios y se acerco a mi oído y me dijo.

-te amo, me fascinas, me enloqueces, me encantas-me susurra.

y vuelve a besar mis labios, y pasa a mi cuello y lo besa y lo mordisquea suavemente, pero en eso el para y se queda inmóvil mirándome por la falta de aire que en ese momento hubo, y le saque la camiseta y y me siguió besando en lo que logro ver en sus brazos unas marcas y me llamo mucho la atención y me senté y le agarre el brazo.

-¿que es esto?- le dije mientras le agarraba el brazo.

-umm... pues.. no es nada- me dice nervioso.

-dime que es esto- le digo casi enjada.

-son cortes- me dice triste.

-¿por qué?- le pregunto extrañada.

-por problemas, tu no te preocupes.-me dice colocandose la cammiseta.

-pues me preocupo, me interesas, y quiero que estes bien.

-Gracias por preocuparte por mi, pero enserio todo esta bien... relajate.-me vuelve a besar.

pero yo no le acepto el beso y me vuelvo a alejar.

-enserio me preocupas-le digo mientras lo abrazo.

 -gracias por preocuparte por mi- tambien me abraza.

- lo harre el tiempo que me lo permitas- lo consuelo.

- en ese caso jamas te vallas.

-nunca lo are - lo beso.

- ¿y si salimos un rato?.

-¡claro!, me visto y vamos.

me comienzo a vestir en frente de el, me queda mirando embobado, al terminar nos fuimos al lugar en donde nos conocimos, miro mi reloj y veo que ya son las 11:30 p.m. cuando llegamos.

-es un poco tarde, ¿no crees?- me pregunta con dulzura.

-si, pero para mi todo es perfecto mientras este a tu lado.

-pues tengo que contarte algo, ¿vamos a sentarnos por ahi?-apuntando unas bancas bajo un gran árbol.

-claro, vamos- amino a su lado hasta llegar hasta las bancas

y me empieza a contar el problema.

nota de autor

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se que no son muy largas, pero quiero que duren mucho, ojalas les gusten mis historias