Paciente 324 » BaekLay | Dreabble «

Parte Única.

Byun Baekhyun es demasiado joven para ya haber conseguido todo lo que tiene. 

Demasiado joven pero también demasiado talentoso y dedicado a su trabajo en el hospital psiquiátrico de Seúl.

"Toda acción tiene su reacción" y para Baekhyun todas esas reacciones han sido espléndidas.

Apasionado por su trabajo, ve a la mente humana como un parque de diversiones. Un sube y baja de constantes cambios, arriba, extasiado al punto de la locura; abajo rodeando y coqueteando con la muerte.

Una casa de los sustos en constante expansión. Un lugar oscuro que alberga a los peores demonios de la humanidad.

Comenzó como psicólogo, titulado a los veintidós años trabajó aquí y allá con personas depresivas y de constantes conductas suicidas. Hizo investigaciones en el campo de la neurociencia, luego prosiguió con la psicología conductista y más tarde se metió de lleno en el psicoanálisis. No quería dejar ningún área sin explorar.

Unos pocos años trabajando para la policía de investigaciones de su país le dieron el pase para interesarse en el familiar mundo de la psiquiatría.
Ahí se enamoró, los estudios de trastornos mentales fueron su más grande obsesión. Bipolaridad, esquizofrenia, trastornos obsesivos compulsivos e incluso la despersonalización de la emoción fueron sólo una de las cosas que ocuparon sus noches hasta el día de su titulación.
La relación entre las ciencias biológicas y la ciencia de la psicología se le daba bien.

Ama, de verdad ama entrar al oscuro mundo de la mente humana y enfrentarse de frente y sin miedo con esa entidad oscura y peligrosa que destruye la cordura y desata la locura.
Reconocer patrones y de alguna manera tener previsto todo lo que antecede una acción simplemente le fascina y por ende, siempre está preparado para todo lo que se avecina.

Lo único que no logra entender del todo es el amor. Sabe los procesos químicos, las disfunciones que sufren los nervios y el corazón. En algún momento de su vida también ha sentido eso, pero simplemente no acaba de comprender. ¿Locura de amor? Eso no existe, todo es un desorden mental que probable y comúnmente terminará con alguno de los implicados muerto, y el otro en una institución de sanidad mental, claro, sólo si se demuestra que ir a la cárcel le hará llegar al punto máximo del desacato y encontrará que la mejor forma de escapar sea la de acabar con su vida, enterrándose un puñal o colgándose de alguna viga.

Baekhyun adora su trabajo y es por eso que no dudó ni siquiera un instante en irse a otro país en pos de hacer más práctica y aumentar el peso de su currículum.

El idioma no fue problema, ya había tenido algunas clases de chino mandarín en la secundaria, solo bastaba poner en práctica lo básico y aprender lo nuevo. ¿Conseguir una buena vivienda? Por favor, fue a China con todos los gastos pagados y un sueldo de muchas cifras, una casa era sólo un pequeño detalle que arreglar. Un detalle que luego de una semana estaba completamente solucionado y entonces sólo se dedicó a insertarse en el ambiente y al fin trabajar.

Las paredes descoloridas de la institución le daban la sensación de bienestar; las luces tenues a lo largo del pasillo le causaban un exquisito terror que sólo se complementaba con el color del patio lleno de hojas secas y con juegos abandonados al azar del tiempo. Había un columpio a un lado, lo suficientemente grande como para que aquel enfermo con amnesia anterograda pudiese jugar, y es que el chico se había quedado en los 12 años, y no en los 23 que ahora debería asumir. De ahí sus comportamientos psicóticos, un poco de desorden emocional que su anciana madre ya no pudo controlar.

Baekhyun estaba bien, y aunque había mucho que conocer jamás se dejó llevar por la curiosidad o al menos hasta que, al pasar junto a la habitación 203 una voz le hizo parar y quedarse junto a la puerta sin poder avanzar y seguir su camino.

El sonido que traspasaba la madera de la puerta era más un susurro, como si estuvieran hablando justo sobre su oído de modo errático pero seductor hasta que una risa alta y sin sentido erizó sus cabellos y por primera vez en mucho tiempo le obligó a caminar y no a quedarse ahí, totalmente dispuesto a ayudar y controlar.

La primera vez que Baekhyun se atrevió a preguntar sobre el enigmático paciente de la habitación 203 fue también la primera vez que vio su expediente y así su rostro. Clínicamente sólo era conocido como el paciente 324 pero él era más que un número. Era Zhang Yixing, un hombre de 28 años y con la piel tan blanca y tersa que daba la sensación de ser irreal.
Sus ojos de un marrón oscuro estaban perfectamente delineados por sus pestañas largas, sus labios rosas y gruesos daban la sensación de haber sido pintados con el más delicado pincel del artista; con facilidad habría sido modelo, artista o cantautor pero estaba loco. La esquizofrenia indiferenciada había tomado completa posesión de él. Tenía alucinaciones, ataques de pánico y muchas veces tuvo que ser contenido con una camisa de fuerza para que dejara de tener espasmos que solo le llevaban al borde más delgado del abismo, sin embargo Baekhyun veía algo más en él, veía a alguien con un misterioso encanto, una seguridad y un talento innato para continuar por horas una conversación. Sus ojos siendo dos puertas a un mundo inexplorado invitaban a Byun a quedarse horas mirándolo, horas en las que se perdía del mundo y no había nada más. Yixing tenía hoyuelos y una bonita forma de acariciar las manos del médico, sus palabras susurrantes hacían temblar la fibra más sensible en el interior de Baekhyun.

ㅡLlévame a ver un conejo, Baekhyun. Te juro que me portaré bien. ㅡ El enfermo sonreía con coquetería, sus manos jugando detrás de la oreja del doctor. ㅡDéjame salir, nadie lo va a saber.

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(*) Esquizofrenia: trastorno mental grave que afecta el paciente deteriorando sus capacidades en diversos aspectos psicológicos como el pensamiento, la percepción, las emociones o la voluntad.

(*) Esquizofrenia indiferenciada: es aquella esquizofrenia que no reúne los síntomas de los subtipos o presenta varios de ellos.

(*) Subtipos de esquizofrenia: paranoide, hebefrenica o catatónica.