Noche.

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Tal vez al principio se parezca mucho al capítulo 117 del manga, pero ya casi al final le cambié, esto es lo que me gustaría que hubiera pasado.

Espero y les guste.

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Su única acompañante de ese momento era la nostalgia de la luz de la luna. El viento soplaba con un poco de violencia. Sus corazones estaban totalmente agitados. Sus bocas totalmente secas, pues ya desde días que no probaban una gota de agua ya que era el no tomar nada de agua o beber alcohol mezclado con nadai.

— Yona... — le habló con voz baja, en esos momentos parecía, una pequeña  Lili sustada por lo que había hecho. Tenía su rostro sucio y frío, al igual que todo su cuerpo, le temblaba cada parte de él, no había excepción alguna. — Yona, yo... Lo he matado... Yo...

La chica de 16 años y pelo rojizo que apenas y le llegaba a los hombros se detuvo y se giró hacia ella. Sin dudarlo la abrazó, indicándole de forma no verbal que podía llorar, que podía sacar su miedo a lado de ella.

Yona ya había matado alguna vez, ¿cómo olvidar cuando Kum-Ji le apuntó a Jae-Ha con una flecha cuando estaba desprevenido? Ella tenía que actuar rápido, habían personas malas, siempre se decía cuando recordaba aquella noche, cuando el amor de su infancia mató a su padre sin compasión alguna.

Lili sacaba sus lágrimas sin contenerse. Esas gotas, que cuando salían de sus ojos parecían pequeños cristales, al recorrer su rostro estás se iban oscureciendo por la tierra y el ollin del lugar donde estaban. Lili había matado a un militar de la nación Sei en defensa propia, Yona había llegado en el momento exacto para sacarla de ahí antes de que más militares vinieran y las ejecutaran en ese mismo lugar.

Cuando pareció que ella ya se había calmado, Yona la agarró de su muñeca y seguieron caminando.

La chica del cabellos oscuro, Lili, de 17 años no podía creerlo.— ¿Cómo Yona podía estar tan calmada al respecto? ¿Acaso ella ya había matado a alguien alguna vez? Imposible, ella apenas y tenía 16 años, además la acompañaban 4 hombres muy fornidos.— pensaba Lili quien estaba siendo casi arrastrada por la hermosa chica, la princesa de Kouka.

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Yona fue una de las primeras en despertar. Su garganta se sentía seca, su boca tenía un sabor amargo, su saliva era demasiado viscosa, su cuerpo dolía y su cabeza retumbaba, era notorio que ya les faltaba beber agua. La luz del sol hacia que su piel ardiera, mucho más.

— Iré a buscar un poco de agua. — propuso Yona al ver de qué Lili ya estaba apunto de colapsar.

De repente se escucharon demasiadas pisadas, choques de metal y trotes de caballos. La princesa se fue a asomar, tal fue su sorpresa al ver nada mas y nada menos que personas del ejército de Sei. Debió de haberle dicho instantáneamente a Lili que no hablara y salieran de ese lugar lo más rápido posible, pero no hubo tiempo.

— ¿Qué es ese ruido...? — preguntó acercándose hacia donde ella estaba. Yona le tapó la boca pero con eso fue suficiente para que un militar las viera.

— Vayan allá, hay dos chicas. Se han de haber escapado de los campos. — ordenó sin más.

Lanzaron flechas hacia el lugar donde ellas​ estaban.
Yona logró empujar a Lili para que está cayera y no la lastimara ninguna, tal fue el caso de que Yona recibió una y le lastimó su tobillo, impidiendo la movilidad de su pie izquierdo.

[Akatsuki No Yona] «Cubierta De Sangre» One-ShotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora