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Querido diario:

Estaba dispuesta a hablarle a Nicholas, estuve toda la mañana reuniendo valor y ensayando las palabras correctas, incluso escribí sus posibles respuestas a mi conversación y mis posibles respuestas a sus respuestas.

Llegue al salón con la mejor actitud pero al llegar a la primera clase el no estaba, lo cual fue raro porque nunca falta o llega tarde, siempre es muy puntual.

No llego ni a la segunda hora, ni a la siguiente, ni en todo el día, me preocupe porque el nunca suele faltar.

Quise ir a su casa para averiguar que ocurría y si estaba bien pero no se donde vive y me daba vergüenza pedirle a alguien su dirección, malinterpretarian la situación.

NicholasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora