TaeKook (Oneshots)

Pesadillas

Me levanté exaltado, otra vez, era la tercera noche, del tercer mes, que no podía dormir bien.

Vi el reloj, 3:00 a.m. siempre era la misma hora. Maldita sea, cuándo desaparecerán las pesadillas, ni las pastillas para dormir logran que pase el sueño de largo.

Necesito ayuda seria. Salí de la habitación tratando de no despertar a los chicos y me senté en la silla del comedor.

Necesito leche tibia, eso puede ayudarme.

Caminé a la cocina y me encontré con él, tomando la leche del cartón.

¿Otra vez tomando la leche del empaque? - pregunté apoyádome en el umbral de la puerta.

Sí, otra vez - dice él riendo y encongiéndose de hombros.

Sabes que eso no esta bien, es antihigiénico, todos los demás también tomamos de esos paquetes de leche - contesté suspirando, viendo como volvía a guardar el cartón.

Dejemos el tema, dime, ¿te volviste a despertar? - preguntó sentándose en la silla y apoyando su mano en su mejilla.

No, estoy dormido, con los ojos abiertos y consiente - respondí algo divertido a lo que él volteó los ojos.

Sabes a que me  refiero Tae - bufó y yo reí.

Perdón, pero creo que ya sabes la respuesta - dije mientras me sentaba en la silla de su lado y acostaba mi cabeza en mis brazos, cerrando los ojos.

Sentí sus manos en mi cabeza, acariciándome; nunca voy a entender como es que puede darme tanta paz.

(Kookie Narra)

¿Algún día vas a contarme qué es lo que no te deja dormir? - pregunté

Silencio.

¿No quieres contarme o no puedes? - indagué, para nuevamente, escuchar silencio por parte del chico, quien ahora había inclinado levemente su cuerpo en busca de más caricias.

Suspiré y noté como su respiración y cuerpo empezaban a relajarse, pues había estado bastante tenso momentos antes.

Seguí acariciando su cabeza, pasando mis dedos entre sus sedosos cabellos y preguntándome, qué era lo que lo asustaba tanto.

Esto había empezado hace mas o menos tres meses, o es lo que deduje pues lo noté hace dos meses en realidad.

/Flashback/

Me desperté para ir al baño, como cualquier persona normal, mientras caminaba al baño, pasé por la cocina, donde encontré a un Tae de espaldas calentando leche en el microondas, mientras suspiraba pesadamente y acariciaba sus cienes; pensé que había tenido una mala noche, y no quería molestarlo a esas horas de la madrugada, simplemente seguí mi camino.

Tercera noche, salí del cuarto, pues los ronquidos de NamJoon esta noche, están insoportables, nuevamente vi a Tae salir de la habitación y caminar ,mientras estaba pálido, hacía la cocina, sirviéndose de nuevo la leche y volviendo a suspirar. Admito que su cara me asustó mucho, así que me acerqué a verlo.

Tae - hablé y el brincó levemente en la silla, mientras volteaba a verme y me mostraba una de sus lindas sonrisas.

¿Qué haces despierto a esta hora? -  preguntó, mirando su celular, tratando de sonar como un mayor responsable.

Te digo lo mismo, mañana tenemos un día muy atareado - respondí - deberías estar durmiendo.

Asintió con la cabeza y se levantó, cuando estaba por salir de la cocina, se detuvo y sin voltear a mirarme habló.