El Color Del Amor (PRÓXIMAMENTE)

capitulo uno

(-no puedes cambiar lo que son las personas
-¿y que se hace?
-amarlas tal cual son... No importa su color no importa su físico... Nadie pide nacer de color o ser gordo, tampoco pueden evitarlo. Después de todo, nadie es perfecto)

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La familia de Ernesto se componía de su esposa y su pequeña hija... Ahora tenían a "la pequeña niña de color' como la llamaba Íngrid la esposa de Ernesto, ella también le había hecho mala cara a la pequeña criatura a lo que su esposo contestó

-no seas ridícula mujer... Es solo una niña- dice mientras le quita la pequeña niña de los brazos y le mira- es hermosa no importa su color no crees?- mira enternecido a la pequeña niña- Amanda...- murmulla mientras sonríe

-¿que dices?- pregunta Íngrid

-su nombre será Amanda- aclara

- sigo sin aprobar esto- se queja pero él la ignora

La pequeña Amanda crecía al mismo tiempo que la niña Isabel la hija de Ernesto y Íngrid de tes blanca como el mármol y cabellos rubios cual rayos del sol

Cuando la pequeña Amanda tenía 2 años sabia que no podía salir de su habitación cuando su tío atendiera visitas, ella y Isabel se volvieron inseparables desde pequeñas... Aunque A manda fuera mayor casi 3 meses juntas recibieron estudio... Juntas hacían todo pero Amanda sabia que por su color algunas cosas le eran prohibidas... Como cenar en la mesa grande cuando alguien se quedará a cenar, tenia que comer con la criada 'Maria' quien había atendido a  Amanda cuando era pequeña

Su tío era muy bueno con ella y le daba el mismo trato que le daba a Isabel en cambio Íngrid aunque no le trataba mal A manda sabia que no le quería

Un día en una tarde mientras tomaban el té su tío Ernesto, su prima Isabel y ella su tío comenzó a relatar lo que había pasado con su madre, porque sus abuelos no le querían y el porqué era de su color

-por que me pusiste tal nombre tío?- pregunté y él sonrió

-porque ví en tus ojos lo amorosa que serías- responde mirándome a los ojos- aquí esta una foto de tu madre- me extiende una foto vieja y la tomo en  mis  manos

-Era muy hermosa- comenta Isabel cuando ve la fotografía

Mis ojos se iluminan al ver el rostro de mi madre sonriente, parecía un ángel

-Sí  era  muy  hermosa -  respondo en un murmullo  estaba hipnotizada por la fotografía

El tiempo pasaba y mientras las dos primas crecían  Amanda  se daba cuenta que para ella muchas cosas eran mas difíciles... Aunque su tío  Ernesto tratara del mismo modo a ambas  chicas. Cierta  tarde Íngrid le ordenó  a las dos chicas que se arreglaran  para ir por nuevos vestidos. A Isabel  esto le parecía muy aburrido pero a Amanda le encantaba  ella no salia mucho de casa

-tu quien eres? -  me pregunta un hombre cuando me dispongo a entrar a la tienda con mis tías... No era una pregunta normal en su cara se Veía  desaprobación y juraría que  casi asco

-viene  conmigo - interrumpe  mi tía Íngrid 

-oh...  Señorita Íngrid  desconocía que tuviera  una  criada de acompañante- dice el hombre y la situación  se torna incomoda

- es mi sobrina- responde mi tía y  me hace pasar  a la tienda

Me quedé  un rato pensando  lo ocurrido... Mi tía jamás me había  defendido  de tal modo