Nunca te has sentido como si no fueras nada? Un pequeño grano de arena en medio de una tormenta épica, una gota de agua en medio del mar.. Ese sentimiento que aveces te embarga cuando caminas y sientes que tus pies corren un camino que no lleva a nada, donde miles de pasos se perdieron en el olvido. Eso es la sombra de nuestros mayores miedos, arraigan en nuestra alma, robándonos lo que somos, como pequeños insectos que se alimentan de la esperanza, el amor , la alegría..dejando solo el odio, la soledad, el frio del miedo.. Nuestro temor a no dejar recuerdo, a que al girarnos esa persona pregunte , quien era ese?.
Ese es nuestro mayor miedo, nos gusta destacar, la alabanza, el reconocimiento.. pero eso esta fuera de nuestra liga. Somos el linde de la realidad, trabajamos en las sombras como en su día lo hizo Cyrano de Bergerac, somos usuarios de la palabra escrita, como dioses en un mundo donde lo que se dice y se oye, es lo que lo mueve, capaces de cambiar el rumbo de una vida con una frase, de romper un corazón con una palabra, de robar el aliento con una mirada. Somos los condenados con el don de hablar, con el maldito talento de escribir. Somos..bueno, soy el que le dice lo que tiene que susurrarte al oído, soy aquel que habla a través de sus labios cuando te consuela, soy el que canaliza lo que siente y no sabe explicar, solo soy una herramienta de uso, solo un recuerdo lejano cuando el te ame.
Por eso enterré mi corazón , como todo escritor, como dueño de las palabras no merezco amar, por que nunca estaré seguro si es real, nunca sabre si lo que sientes por mi es un sentimiento real, o la ilusión que mis palabras crean.
Todos cometemos el error de creer que podemos querer, intentamos empezar una relación especial, le dices lo bonita que esta , el brillo en sus ojos te dice que le gusta oírlo por mas que diga que hoy se ve fea, tu en ese momento piensas, se que puedo hacerla sentir guapa, le coges con suavidad la cara y le susurras al oído, que su belleza empalidece el sol, tu voz coge el tono exacto, eriza su piel, tus ojos tienen la seguridad que te da el conocimiento. Ella se siente guapa y te empieza a querer, es como una chispa , un destello en el rabillo del ojo, pero eso que tiene que uniros esta naciendo , delicado y frágil.
Pasaran los días, curaras sus miedos y sus temores, sus inseguridades.. te sentirás completo como nunca antes , creerás que no necesitas el don, que ya cada palabra esta dicha, que vuestro amor es como un lienzo donde pintar sueños, como un jodido libro perfecto, que no tiene final.. ahí comenzara tu perdición.
Te quiere, te lo dice , tu se lo dices a ella, primero como un susurro que no quiere salir, por miedo a romperse de lo fino que es, luego ese pequeño susurro crece y se convierte en el grito mas fuerte, te quiero en cada segundo del día le dices, y ella te cree..pero no es cierto.
Pasan los días , ella ya se acostumbra a tu tono de voz, al ritmo de tu respiración, conoce tus palabras y como las acompañas con una suave caricia por su espalda , reconoce tus te quiero entre la multitud, es en ese instante cuando se rompe, no solo tu sabes hablar y escribir, en algún punto de esta misma ciudad un bendecido con el don ayuda a alguien enamorado de ella, el le dará las nuevas palabras, le susurrara y le hará sentir lo que tu hacías, cuando llore contigo no sabrás secar sus lagrimas, notaras la desesperación de que se vea fea y no puedas cambiar ese sentimiento, llorara tu alma con cada adiós sin saber si sera el ultimo, cada latido de tu misero corazón latirá por ella y no podrás evitar que con ella muera.
Ella sufre con la indecisión , del pálido amor que queda por mi, y el nuevo fuego que siente por el, no te cuenta todo lo que hace al día, tus conversaciones se vuelven monótonas y frías, se aleja y cada día que pasa es un recordatorio de porque no amabas, de que no tienes esa oportunidad.
El nuevo le dice que la quiere y su corazón duda, su cuerpo y su mente recuerdan que esto ya lo a sentido pero no lo recuerda.. ya no te recuerda a ti.
Se aleja de ti, te dice que no existe la magia, que te quiere, pero no como debería quererte, te dice adiós.
Ella no sabe lo que eres, no sabe que tienes el don y que los que nacemos con el don no podemos amar, ahora estas condenado, cada frase de amor que escribas, cada vez que consigas que alguien haga llorar de felicidad a una mujer pensaras en ella, en su sonrisa en como tu aliento erizaba su piel, como le diste lo que eras y no fue suficiente, como creíste que podías enamorarla con tu don y que no volviera para morderte el culo.
Por eso vivimos en la sombra, somos la voz del que no habla, la letra del que no sabe escribir , y ellos son el corazón que no tenemos, viven el amor que se nos negó, tenemos el don.. pero a fin de cuentas, solo es una maldición.