Cold ❄ Yoonmin

❄3❄

—¡Jungkook!

—Ay, tampoco es para tanto, solo me partió el labio y fueron unos golpes —espeto despreocupado.

—¿¡Que no es para tanto!?, ¡Por dios Jungkook!. Te suspendieron durante una semana, y tienes un moretón, bastante notorio por cierto, en el pómulo derecho.

—¿Y?...

—La.. Mhmp —y comenzó a balbucear. Luego de un gran suspiro hablo nuevamente— Ultima maldita vez que te metes en problemas por mi.

— Pero..

—Nada de pero, te suspendieron a ti y Namjoon solo tuvo que firmar un jodido libro de actas, y dime ¿Quien salio ganando? ¿Tu o el?. —Pregunto mientras se cruzaba de brazos.

—Ninguno obviamente, otra firma de Namjoon en el libro y lo expulsan, otro problema en el que me meta y me expulsaran.— elevo sus hombros restándole importancia. — Y ya deja de preocuparte, no me meteré en problemas de ahora en adelante, después de todo no iré durante una semana. Y si me disculpas, ahora tengo que prepararme para recibir el regaño de mi vida. Adiós chim-chim.— y dicho esto Jungkook entro en su casa.

El castaño siguió su camino hasta llegar a su casa.

Otra vez a volver a su rutina de siempre, comer, hacer la tarea, dormir para al otro día y repetir todo nuevamente.
El castaño ya estaba cansado de hacer lo mismo todos los días, ¿que tal una salida?. Sonaba bien, distraerse y hasta quien sabe, podría encontrar a alguien que le haga olvidarse por completo de Namjoon. Si. Ya estaba decidido, esta noche saldría, después de todo es viernes y nadie, en su sano juicio se quedaba en su casa esos días.
Sin mas preámbulos se adentro en su baño para darse una ducha, y reflexionar sobre lo que hoy había pasado.

Jungkook nuevamente se había metido en problemas por defenderlo.

Namjoon había intentado hablar con el y no pudo gracias a Jungkook. Después de todo no es como si Jimin quisiese hablar con este, lo ultimo que quería era estar con el y hablar.

Nota mental: agradecerle a Jungkook por haber intervenido.

Un chico nuevo se integro, un chico lindo, pero no es el tipo de chico con el que el castaño quisiera mantener algún tipo de relación, después de todo no parecía alguien que te diera seguridad, amor y confianza, si no todo lo contrario; y Jimin, no buscaba eso en un chico.

Además de ser regañado una vez por uno de los profesores no se arrepintió de haberlo insultado luego y que casi lo enviaran a la oficina del director.

Y por ultimo recibió una invitación para la fiesta de Taehyung.

Hoy si que había sido un día ajetreado para el castaño.

Necesitaba una salida y despejarse, necesitaba cambiar y que mejor manera de romper con la rutina para cambiar.

O tal vez no.

El castaño salio de la ducha y se puso la ropa que había preparado antes de entrar. Y una vez estuvo listo, tomó las llaves y su celular para echarlo en el bolsillos y irse a la dirección que le había enviado Taehyung.
Al llegar era como se lo había imaginado, gran parte de la universidad estaba allí y las bebidas alcohólicas no podían faltar en este tipo de fiestas.

—¡Chim-chim! —saludo mientras se acercaba a este y lo rodeaba con un brazo por sobre los hombros.

—Hola alíen. —lo saludo.

—Aquí tienes —le paso un vaso con una bebida alcohólica. —Ahora, disfruta de la fiesta.— dijo por ultimo para luego irse, pero antes de eso se devolvió y susurro unas cosas en el oído de su amigo.

—Arriba la tercera puerta la reserve para ti– le guiño un ojo y se perdió entre la multitud.

Si quizás Taehyung era un pervertido que se hacia el inocente, pero era un muy buen amigo de Jimin, no un mejor amigo si no uno en el que puedes contar para diferente tipos de cosas o uno que te cubre la espalda y te saca de aprietos si es necesario. A demás de ser hijo de una familia millonaria era el mas popular en toda la universidad.
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Alcohol, cigarros, musica a alto volumen y universitarios saltando al compás de la musica. Entre ellos había un castaño semi ebrio pero estaba feliz. Finalmente Jimin se había pasado de copas y ni siquiera se dio cuenta cuando termino dentro de la habitación junto con Namjoon.
Ninguno de los dos tenia intenciones de hablar en esos momentos. Se besaban con desesperación hasta que las piernas de Jimin chocaron contra la cama haciéndolo caer sobre esta con Namjoon sobre de el.
Era mas que claro que Jimin no estaba en su sano juicio porque de estarlo ya le hubiera pegado una patada y salido corriendo de la habitación. Pero el alcohol hacia de las suyas, al igual que las manos de Namjoon en el pequeño cuerpo de Jimin.
El castaño cerro sus ojos al sentir como la mano de Namjoon bajaba hasta su pantalón y comenzaba a frotar su bulto; en esos momentos el castaño dejo salir un gemido de su boca, un gemido que hizo que Namjoon se volviera loco y quisiera estar ahora mismo dentro del pequeño castaño.
Tal vez ninguno de los dos recordase nada mañana, o tal vez Jimin no recordase nada mañana, porque a diferencia de el, Namjoon estaba completamente sobrio.

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Muy corto, lo se, pero el siguiente sera mas largo, se los prometo.