En secreto y silencio

Capítulo 1

Regina se quejó en voz alta mientras Emma  tira hacia arriba contra el marco más alto por encima de ella, con las manos colocadas firmemente en la cintura de la morena, Regina siente el miembro duro empujando en ella. Los dos habían alcanzado casi su liberación, y con un empuje final,  llegaron, con un suspiro al  placer.

"Increíble como siempre, hooney," dijo Emma. Ella la besó en la frente y   mantuvo su vista en ojos marrones de la morena, iluminado por el suave resplandor de las luces. Ella nunca lo expresó, pero había algo en ella que le gusta tener.

"Tienes que salir pronto", dijo Regina murmurando en voz baja, odiándose por actuar así ocultando su tristeza en su tono. Amor es debilidad.

"Killian y yo tenemos planes para cenar con mis padres y Henry o algo así. Lo que sea," Emma murmuró en respuesta, moviendo su mano hacia su entrepierna para hacer desaparecer el apéndice añadido.

"Mmmmhmmm," tarareó y rodó a un lado con los ojos cerrados, rompiendo el intenso contacto visual entre sus ojos marrones y las esmeraldas. Ella fingió somnolencia, queriendo evitar la incómoda salida de la rubia (dolorosa). Ella siempre estaba agotado físicamente se había estado sintiendo mal últimamente y lo único que pudo decir a Emma fue: "que la pases bien con la maravilla sin manos, sus padres y Henry. Usted sabe dónde encontrarme cuando necesite un juguete sexual," dijo acurrucándose más en la almohada.

Emma tiró de Regina para hacer frente a ella, ahuecando la mandíbula de la morena a besar esos labios exuberantes ligeramente mientras decía en serio "Regina, eres más que un juguete sexual para mí. Lo sabes, ¿verdad?"

"cierto . Así que usted lo dicho, Salvador".

"Cariño, sé que empezamos simplemente puramente físico pero es más ahora. Confía en mí, estoy seguro de ello," Emma metió el pelo de Regina detrás de la oreja. Regina absorbió el afecto de Emma, ​​una parte de ella odiaba el hecho de que ella ansiaba toques suaves y cariñosos de la rubia. Ella era esa mujer en esas películas o novelas románticas de mala calidad de las cuales  se burlaba en el  pasado.

"Si está seguro entonces ¿quién soy yo para discutir con el bueno y poderoso Salvador?" Regina bromeó, sonriendo mientras besaba la comisura de la boca de la rubia.

"Oh, yo sé lo que eres, la hermosa señora alcalde ." Emma decía  su sentencia con ligeros besos en las mejillas de la morena. "Y sé que es un hecho que no estoy bien. Estoy engañando a mi novio con la madre de mi hijo."

"no me importaría salir en público . No me importa lo que la gente del pueblo tiene que decir. siempre que llegue a estar contigo y Henry," dijo Regina, apenas conteniendo un bostezo. "Alguien tiene sueño", la rubia se burlaba como Regina detuvo la cubierta sobre su figura desnuda. Ella parpadeó admirando  los bíceps tonificados de la Emma resultado de todas esas flexiones que iba a hacer, sus rizos rubios magníficos y esos ojos de esmeralda que Emma compartió con su hijo. Lo que  daría por estar en los brazos de Emma para el resto de sus vidas.

"Vuelvo más tarde esta noche, por lo que no es necesario que me esperes despierta", Emma se inclinó y la besó profundamente en los labios, "A pesar de que sabes que amo cuando me esperas " añadió mientras se deslizó más lejos de la morena.

"para ver esto? " preguntó, mientras empujaba las sábanas hacia abajo y abrió las piernas. Ella jadeó con fuerza mientras  insertó dos dedos en ella. Ella gimió con fuerza empujando sus dedos dentro y fuera de su calor. Regina soltaba  gemidos, sin embargo, eran falsos cuando ya que  Emma  sin duda la había  satisfecho sexualmente. Si Regina solia utilizar cualquier cosa de su tiempo como la Reina Malvada durante sus interacciones con Emma, ​​y eso era su magnetismo sexual crudo. Algo tenía que hacer para que Emma se quedara.

Emma se humedeció los labios al ver a Regina gimiendo arbitrariamente y Regina podía ver la lujuria en sus ojos esmeralda. Emma se acercó más a ella de nuevo. Ella calculó que tenían suficiente tiempo para un polvo rápido como para calmar su propio libido que estaba al máximo con  la idea de tener a  Regina de nuevo.

"Su novio está esperando," Regina intervino movimientos de la rubia hacia ella, cruzando los brazos sobre sus pechos brillantes, aún sudoroso de su turno anterior.

"Maldita sea," Emma maldijo mientras corría hacia delante para tirar de la mano de Regina hacia ella.  acarició suavemente el calor palpitante, excitada por el hecho de que Regina aún estaba mojada por ella, a pesar de haber pasado las últimas dos horas follando como conejos. Emma era casi tan hábil como Regina en las burlas, haciendo una pausa de media carrera y susurró: "Hasta la próxima vez, la hooney "

Regina no respondió, pero besó el cuello de la rubia y continuó a chupar a la ligera. "hooney, me está torturando aquí. Ugh-" Se apartó de la cama a regañadientes, y tiró de sus bragas y pantalones vaqueros flacos sucesivamente. Ella recogió su sostén en el suelo y   su camiseta sin mangas. Emma se acercó al lado de Regina  y   envolvió su chaqueta color rojo alrededor de la morena. Regina arqueó las cejas ante aquel  gesto.

Emma sonrió, "Usted puede tener esto," dijo cepillaando el cabello castaño oscuro de la frente de Regina y besó el espacio que creó suavemente.

"¿No cree que su novio notaría si dejara de usar su chaqueta favorita?" preguntó Regina.

"Simplemente le diré que no la llevo más ," Emma respondió a la ligera y continuó: "Se ve tan jodidamente sexy en ti, cariño. Dormir un poco, tal vez? Dijo . 

"Está bien, querida," Regina volvió a bostezar. Se estiró y tiró de las mantas sobre su cabeza.  Luego se oyó la puerta de su habitación abrirse  y cerrarse.

Sólo habían pasado tres semanas, pero se sentía como toda la vida. Había pasado las semanas, mientras que Henry estaba en el campamento de verano, en ese tiempo ella había sidos la amante de Emma. Había experimentado los placeres del sexo en casi todos los sentidos y que nunca fue un momento aburrido entre Emma y ella misma. Pensó, tal vez fue porque el sexo sucedió con Emma Swan. No podía imaginar pasar un día sin Emma ahora que había experimentado estar con la rubia.

Killian Jones, que no era muy aventurero en la cama y Emma, ​​necesita variedad típica de la posición misionera. Regina, había sido la elección perfecta. Ella era increíblemente hermosa, y la tensión sexual entre ambas mujeres podría romper una motosierra. La morena estaba solo mientras su hijo estaba ausente y Emma menudo había fantaseado con el alcalde luchadora casi todas las noches. Así que cuando Emma dio el primer paso para darle un beso en la sala de conferencias después de la reunión de la ciudad, Regina se sorprendió. Antes de darse cuenta, Emma les había transportado al vestíbulo inferior de su casa mientras sostenía la morena con fuerza por el trasero.

El Sexo con Emma Swan era increíble y sin lugar a dudas, cuando no estaban teniendo relaciones sexuales, el afecto y el cuidado de la rubia calentaban su corazón. Una parte de ella, sentía el dolor de saber que estaba siendo utilizado para una sola cosa. Las campanas de su cabeza se mantienen sonando ya que le advertían que tales condiciones no eran propensos a trabajar en su favor. Pero ella no les hizo caso, ella estaba en trance con Emma Swan. Capturado por el Salvador y sus afectos calentaban su corazón frío y oscuro. El asunto  estaba bien con ella y se convenció de que no tienen que estar en una relación. Y mientras se quedaba fuera a la inconsciencia, no podía dejar de pensar en la idea de ser mantenida en el secreto en silencio y mientras Emma tenía la cena con su familia Regina se  consoló al saber que la rubia estaría de vuelta cuatro o cinco años horas más tarde esa noche.