Episodio I

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Está mañana me desperté gracias al maravilloso sonido de mi despertador que fue a dar al piso. Aún con cansancio, logre pararme de la cama y dirigirme al baño. 

Desde pequeña me he acostumbrado a levantarme y ordenar mi habitación incluso cantar al mismo tiempo, aunque no todos los días me va muy bien que digamos, como en el momento en que me doy cuenta que no puse mi alarma para ir al Instituto. 

Esa era yo corriendo una vez me he percatado que estaba a punto de perder mi examen y con ello mis excelentes notas académicas por lo cual me había esforzado estos 3 años; Me meto a la ducha para bañarme lo más rápido que puedo y salgo a toda prisa a buscar algo para ponerme.

Una vez frente al espejo me pongo un vestido blanco de encaje que tanto me gusta, me maquillo ligeramente por la hora, busco mis zapatos y me decido al final por unas sandalias cafés que mi vista enfoco más cerca, agarró mi mochila y me dirijo al comedor que se encuentra solitario lo que me da a entender que mi hermano ya rato se ha ido; Así, que sólo tomo una manzana del refrigerador y al abrir la puerta de mi casa un grito me hace pegar un brinco en mi lugar.

- Deyla, ¡vamos se nos hace muy tarde! -dijo señalando su auto.

Me dirigí a ella enseguida y me quedé impresionada al ver que su auto era amarillo, ella me miro con una gran sonrisa.

- ¡Taram! -dijo dando saltitos.
- Amarillo? -Pregunté- Enserio? -dije frunciendo la ceja.
- Eso lo hace U-N-I-C-O -Dijo riendo por debajo.
- Ja ja por supuesto -respondí pasándome frente a ella.
- Lo digo enserio- respondió haciendo un puchero.
- Si como no.. -dije subiendome al auto y encendiendo la radio. -¿Nos vamos? -le pregunte. y recibí una sonrisa de su parte.

Subió al auto corriendo llena de emoción, después de aquella escenita, lo puso en marcha, mientras cantabamos al par de la musica, pude notar que faltaban algunos minutos para que iniciará nuestra clase y con ello nuestro examen; Algunas veces me pongo a pensar en quien tuvo la ingeniosa idea de crear las matemáticas, ¿porque?, sin duda era alguien que no tenía otra cosa que hacer, aunque era buena en las matemáticas, símplemente sabía que eran un dolor de cabeza cada que alguien no entendía una parte y el profesor tenía que repetirlo varias veces era frustrante.

Al llegar al estacionamiento, varios chicos se encontraban haciendo un alboroto.

-"¡Pelea! ¡pelea! ¡pelea!" -Gritaban al unísono los jóvenes que se encontraban ahí.

Voltee hacia keyla y la vi asustada con los ojos llorosos, cuando reaccione ella ya se dirigía hacia la multitud.

-¡Kendall! -gritó mí amiga y empezó a empujar todo aquel que estaba a su paso.

Al acercarme más junto a ella vi que era su hermano, quien estaba peleando con un de los populares de la escuela o mejor dicho "niños bonitos".

-¡Te crees el que manda!, eh, ¡Responde! -le gritó kendall a Damian, uno de los chicos al que todas las chicas corrían detrás de el.

-¡Cállate idiota! -le respondió gruñendo Damián.

Cuando en eso se volvió a desatar la pelea donde nadie se metia, sólo observaban como se daban golpe tras golpe; Muchos de los expectadores se encontraban con sus moviles capturando aquellos momentos, que para mi amiga por su expresión eran de pánico y terror por no poder hacer nada para detenerlos, hasta en el momento en que apareció la directora, quien después de ver el tremendo alboroto se llevó a los dos incluyendo a los que andaban vociferando la pelea, los demás como pudieron huyeron, no querian estar en detención por varios dias, o peor aún ser expulsados, todos dispersaron rápidamente el lugar de aparcamiento. keyla me miro con ojos llorosos y se fue corriendo.

No entendía el motivo se aquella pelea entre ambos si ni siquiera kendall hablaba con ellos, no me quedo más remedio que Entrar al Instituto en su búsqueda tan siquiera esperando verla en su casillero buscando sus libros, pero nada.

No había señal de ella quizás necesitaba tiempo y.. hablando de mi tiempo de llegar puntual a la clase y mi examen se había agotado así que terminé corriendo por los pasillos vacíos en busca de mi aula más no podía dejar de pensar en aquel par de hermanos extraños, al principio cuando conocí a keyla y kendall eran las mejores personas con las cuales rápidamente pude entablar una amistad.

Ella y su hermano habían perdido a sus padres según me comentó en un accidente automovilístico hace dos meses y desde ese día su hermano se convirtió en un imán de problemas, casi no se hablaban, aunque ciertas veces yo la animaba para que se le acercará y hablarán de lo sucedido, ella se negaba decía que el necesitaba tiempo para procesar lo ocurrido, aunque a decir verdad era ella la que no podía procesar todo lo que había pasado desde aquel entonces, mientras tanto el ya lo había superado.

No culpó a keyla, puesto que a todos nos sucede tras la muerte de algún ser querido en cambio a mi, bueno, ya esa es otra historia que aún no ha sido superada del todo, al igual que keyla, mis padres también tuvieron un accidente automovilístico y murieron instantáneamente, algo raro es que Josh y yo sobrevivimos, al menos eso fue lo que nos dijeron nuestros padres adoptivos cuando estábamos pequeños.

Lo positivo es que no estoy sola, amo a mi nueva familia y a keyla la cual es como una hermana para mi la quiero demasiado, tanto que olvido lo que fue de mi hace algún tiempo.

Por otro lado mi hermano Josh, ha sido siempre tan protector conmigo desde que tengo memoria aunque se me hacía raro que hoy no me había traído o despertado..

Al llegar al salón y abrir lentamente la puerta, el profesor se encontraba pasando lista cuando...

-Deyla wesley.. -dijo con su voz tan aguada que siempre me hacía dormir al repetir varias veces una ecuación.

-¡Aquí! -respondí desde la puerta, a lo cual todos voltearon a verme rápidamente a excepción del profesor.

-Señorita wesley, usted nunca llega tarde, pero dígame cual es su excusa sabiendo que hoy hay examen -dijo con la mirada aún en la lista.

- Murió mi cachorro -dije fingiendo tristeza.

-Al menos es mejor que la de "mi perro se comió mi tarea" o no señor mathius -dijo mirando a uno de mis compañeros y yo solo rió por su comentario -Pase por favor. -al decirlo prosiguió pasando lista, y cuando termino, empezó el rezó, digo "la clase" y de ahí el examen.

Cuando al fin finalizaron las clases estaba agotada de tanto buscar a keyla, me dirigí a la parada, puesto que no estaba el auto de Keyla y supuse se sintió mal como hace una semana que me abandonó y se fue a su casa, y yo esperandola en el centro comercial, así que me fui a mi casa preocupada por keyla y sin saber que había ocurrido aún..

"Quien dijo que era facil"

Destino Sangriento |Lazos ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora