La Secta

Ep. 8 "Revelaciones, parte dos"

--- POV (John Evans)---

— ¿Y que va a pasar con la otra chica? —pregunto masajeando mi espalda Eva—. ¿Y si escapa como lo hizo Clarisa?

— Ella no escapara —dije levantándome de la cama mostrando mi cuerpo desnudo—. Terry la esta cuidando, y... no creo que él sea capaz de traicionarme como lo hizo tu hijo.

— Me hiciste un gran favor asesinando a ese idiota —Eva se acerco ami por detrás y tocó mi pene para después comenzar a moverlo, provocando en mi una erección de inmediato—. Nunca estuve de acuerdo con esa maldita adopción.

Y tras tener sexo como si nada nos importara, me apresure a ir a la bodega, quise asegurarme que Natalie estuviera cautiva y que Terry la estuviera cuidando.

***

Cuando llegue a la bodega el no ver la patrulla de Terry fuera provoco en mi pánico. ¿Acaso este demente se había atrevido a desafiarme tal como lo había hecho Greg?

— ¡Terry! —grite bajando del auto—. Terry!

Y no obtuve nunca respuesta, y lo que ya temía se volvió realidad al no verlos dentro.

— AAAGGG —grito de coraje azotando la puerta de la bodega y camino hacia el pick up, tomo la pistola con la que había matado a Greg el día anterior y salí a buscar a ese par de estúpidos, sabía que no estarían muy lejos.

--- POV (Roy)---

Todo era bastante confuso, ese enorme cubo con un bosque en su interior en pleno desierto, ¿Que pudiera ser todo esto? Muchas veces había leído acerca de que el gobierno estadounidense hacia pruebas nucleares en el desierto de Nuevo México o del misterio alrededor del área 51, pero nunca había leído algo sobre lo que David y yo acabamos de descubrir.

— Yo también tengo algo que confesarte —dijo David escondiéndose detrás de un pequeño arbusto, acabamos de llegar a la aldea que miramos antes.

— ¿En serio? —pregunte frunciendo el ceño— ¿Tú también tienes un secreto para mi? ¿Me dirás que estás enamorado de mi?

— No es broma —en vez de reír, David se mostró serio—. Mi condición de autismo es una farsa.

— ¿Que? —me paralice por completo al escuchar esa confesión salida de la boca de David, aunque mencionaré que si yo estuve fingiendo mi ceguera, nada podría sorprenderme ahora.

— Todo tiene que ver con el reverendo John Evans —se lamentó David mientras me invitaba a sentarme a su lado.

— ¿El reverendo? —pregunto incrédulo— ¿Que tiene que ver un religioso en que tu tengas que fingir que eres un chico con un problema de autismo?

— El reverendo no es quien dice ser —hizo una pausa—. Te lo contaré todo.

+++ INICIA FLASHBACK +++

— ¿Autista? —pregunte— ¿No es mejor utilizar una simple silla de ruedas?

— Haber si no es un maldito menú para que elijas lo que vas a hacer idiota —exclamó golpeando la mesa John, mi madre solo lo miro—. Se trata de hacer lo que yo diga, y si te estoy diciendo que serás un maldito autista, es por que seras un maldito autista. ¿Entendiste?

— Sí —respondí.

Este hombre llamado John Evans acababa de llegar al pueblo diciendo primero que era el nuevo reverendo, y de un día a otro lo encontré teniendo sexo con mi madre hasta que estábamos en este punto en el que él había tenido la brillante idea de que yo y mi hermano adoptivo reclutaríamos jovencitas para llevárselas a su servicio.