De Camino a Sanidad (El lupus y Yo)

El lupus y el Sol

Traducción
Del Lupus site

SLE o Lupus es una enfermedad multi-sistémica con una tendencia a causar alergias en la piel. Estas aparecen sobre la piel (en el área de la cara, el cuello, las manos y los pies) después de ser expuestas a el sol. Estas alergias son conocidas como alergias foto sensitiva y son una forma común de identificar el lupus.

Algunos pacientes de quejan de experimentar síntomas adversos después de exponerse al sol, aunque sea por poco tiempo (mínimo de 30 minutos). Se presentan casos de migraña, náusea o dolor en las extremidades. Las extremidades se muestran tiernas o hinchadas y aumenta la posibilidad de un ataque de artritis relacionada al lupus. Todas estas reacciones son manifestaciones de la foto sensibilidad.

Otros aspectos que se pueden presentar a partir de exposición al sol (en casos extremos) son: fiebre, dolores de pecho, molestia al respirar, problemas del riñón y manifestaciones de epilepsia. En algunos casos extremos los pacientes son sensitivos a las luces fluorescentes, pero estos casos son mínimos.

¿Qué elementos del sol causan la activación del lupus y el surgimiento de alergias?

Se trata de las bandas de luz ultravioleta en el sol. La luz ultravioleta afecta las células de la piel, provocando la desintegración celular. En personas saludables, no afectadas por lupus, estas células muertas son rápidamente descartadas y la única consecuencia es una leve insolación. Sin embargo, en los pacientes de lupus ha quedado demostrado que las células muertas no son desechadas de manera satisfactoria. Por tanto, la presencia de las células muertas desarrolla inflamación y genera una respuesta defensiva del sistema inmunológico. El sistema inmunológico corresponde agresivamente, como si se tratara de pelear contra una infección, más sin embargo se está atacando así mismo, al no diferenciar.

 
 

¿Por qué algunas personas con lupus tienen manifestación de otros síntomas después de exponerse al sol?

La respuesta del sistema inmunológico al percibido ataque, lleva a la formación de anticuerpos. Los anticuerpos están formados por células blancas y tanto las células blancas como los anticuerpos circulan atraves es de todo el organismo.

En el caso del lupus estos anticuerpos están atados al DNA y a las moléculas conocidas como Ro. Según se puede concluir, la inhabilidad de descartar células muertas no está limitada a la piel y se manifiesta en otros órganos también. Cuando los anticuerpos encuentran esta situación en el organismo, se adhieren a las moléculas que se perciben afectadas. Automáticamente se presenta un complejo inmune que desarrolla una serie de procesos inflamatorios, los cuales se hacen evidentes al manifestarse como síntomas en otras partes del cuerpo. Sin embargo, aún no se determina porque, algunos pacientes presentan ciertos síntomas mientras otros parecen no estar afectados por los mismos.

 
 

¿Todos los pacientes de lupus sufren de sensibilidad a la luz?

No. Un 60% de los pacientes de lupus presentan casos de sensibilidad a la luz y alergias relacionadas. Un grupo pequeño de 10-20%, a pesar de no presentar una foto sensibilidad agresiva, si manifiestan alguna molestia directamente relacionada a la luz solar. Para los restantes (aproximadamente 10% de los pacientes), tales efectos no se presentan. Para este grupo de pacientes, actividades como exposición continua al sol e incluso asolearse de manera voluntaria no parece tener ningún efecto. Como por lo general los efectos de la exposición a la luz solar pueden manifestarse hasta una semana después, se les recomienda a los pacientes de lupus no abusar de su tiempo en el sol, aun cuando se sientas confiados, pues no se puede predecir con exactitud, si habrá una reacción adversa.

 
 
¿Se puede evitar la foto sensibilidad y las alergias por exposición al sol?

Si. Dichas se pueden evitar tratando de limitar la exposición al sol y utilizando bloqueador solar, especialmente durante el verano. Es bueno recordar que la exposición ultravioleta no solo está ligada a países calientes, dicha exposición también puede ocurrir en climas fríos o durante la época de invierno, (por ejemplo, la nieve es un excelente conductor de ultravioleta, al reflejar la luz solar).

El bloqueador solar debe ser como mínimo SPF 25 con protección contra UVA y UVB rayos ultravioleta. El protector solar debe ser aplicado en toda piel expuesta, con retoques a través del día debido a que se desgasta con el sudor y la actividad.