Primera parte

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Había ocurrido una vez más.

Había ocurrido y ni siquiera por un motivo medianamente aceptable.

Axl Rose había dejado a la mitad un concierto, sin siquiera darle alguna explicación a nadie.

-¡Siempre lo mismo! -Le gritó enojado el pelinegro interrumpiendo en la habitación de este, lleno de rabia.

-Agh... no empieces -rodó los ojos el dueño del cuarto, soltando un largo suspiro.

-Eres un irresponsable inmaduro -lo retó empujándolo con poca fuerza.

-¡No me empujes! -Se alteró el más bajo, devolviendo el gesto-. Tampoco es para tanto -se cruzó de brazos. No tenía ninguna excusa que darle.

-¿Por qué te fuiste? -Trató de recuperar la calma para poder hablar tranquilo, sin mucho éxito, debido a la respuesta.

-Porque se me dio la gana -se encogió de hombros, sin poder evitar soltar una risa.

Nuevamente Izzy sintió el enojo subirle por la garganta, atorándose en esta misma.

-Imbécil -masculló indignado-. ¡Ellos pagaron por venir a vernos!

-Ya lo sé, ya lo sé -murmuró-. Pero, bueno, igual alcanzaron a ver un poco -bajó la mirada, sintiéndose un poco apenado por lo sucedido de pronto.

-Nunca cambiarás -le recriminó sin piedad-. Y vas a perder a todos a este paso. Yo he aguantado 14 años, espero que cambies antes de que me canse -y acto seguido salió de la habitación a toda velocidad, se encontró con Steven en el camino quien se preocupó al verlo en esa condición, más Stradlin logró escapar de su interrogatorio en pocos segundos.

Por parte del pelirrojo, no dejó que las palabras de Izzy le afectaran, no pudo. Muy en el fondo sabía que tenía razón, pero el orgullo pudo más con él.

El algún momento el más alto se encerró en su habitación con su apreciada guitarra, no le hizo caso a nadie a pesar de que cada tanto Steven iba a ver si se encontraba bien, lo conmovía, pero luego recordaba que Slash había querido hablar con Axl y le entraban celos.

Pronto quiso dormirse, y no pensó mucho antes de hacerlo.

Por su parte, el pelirrojo no podía conciliar el sueño, las últimas frases que había soltado Izzy antes de dejar la habitación realmente lo habían afectado, ya no podía seguir ignorandolas.

Poco después antes de media noche el mencionado despertó de golpe con el corazón en un puño y la frente con una leve capa de sudor.

No podía dormirse bien, aunque no pensaba irse a disculpar el remordimiento lo estaba comiendo por dentro, porque muchas veces había tenido que tolerar a Axl, pero lo amaba con todo y su carácter y problemas emocionales, ya llevaban casi tres años de pareja, aunque en su interior sabía que se arreglarían después por la pelea, no tuvo valor para salir de la habitación.

Pero sí tuvo los suficientes huevos para levantarse, y poco tiempo después ya estaba rebuscando en su cuarto a algunas de sus apreciadas "amigas", con tal de sentirse reconfortado.

Confía en mí  [Izzaxl]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora