Capitulo - 1 Parte III
Todos los días la misma mierda
Ah no lo creo me beso me beso. Siempre anhele un beso pensé como seria, sabe
cómo lo que comí hace meses este mas- me mas-me masmelo si, si masmelo;
serán sus labios suaves como el pétalo de una rosa ay de solo imaginármelos
otra vez, espera y si lo abre hecho bien, es mi primera vez pero no creo que lo
haya hecho mal me fuera dicho enseguida; ah como sea lo hice si, si mi primera
vez y con la chica me gusta me siento feliz se lo diré a mamá.
Al acércame a mi casa mis pasos los doy cada vez más lento; bajo la mirada al
suelo y me recuerdo que mi madre me dijo que llegaría tarde
- Porque hoy, porque cuando es un día especial para mí, ella nunca esta cuando
la necesito cuando jugué por primera vez mi partido de futbol no estaba ahí a
mi lado apoyándome, ni el día que me gradué de la primaria no estaba, es triste
recibir un triunfo solo y más si yo lo único que tiene y de igual para mí lo único
que tengo.
Le doy un puño a la pared - mierda porque no estas, te necesito
- Te necesito mamá
Es duro aprender a caminar cuando no hay nadie atrás de ti como un apoyo AL
QUE SIEMPRE EH NECESITADO y en ese momento me arrodille en la puerta
con las manos contra el suelo y el puesto del sol a mis espaldas no pude más
tuve que gritar y las lágrimas chocando contra la arena.
- Porque mamá regresa ya no conozco tu calor ya no sé quién eres, solo sé que
me diste la vida, doy un puño al suelo y grito: ABRAZAMEEEE, AQUI ESTOY
LEVANTAMEEEEE DE AQUÍ, LLEVAME A TU PECHO ASME SENTIR
QUE ESTOY PROTEGIDO EN TUS BRAZOS.
Varios minutos en el suelo con el silencio en mis labios, hizo incrustar en mí
una mirada fría como si no importara nada más que yo y lo que piense; seco
mis lágrimas y me levanto como si nada fuera sucedido. Voy a la estufa y veo
mi plato de comida frio preparado de esta madrugada, muevo los hombros como
signo de que no me diera importancia.
El arroz esta duro y frio y así decido comerlo. Al terminar de comer me levanto
y llevo el plato a la mesa y de repente se va la electricidad y quedo a oscuras, lo
que me faltaba. Estiro las manos tratando de encontrar los cerillos en ese momento me doy cuenta que estaban al lado del florero. Enciendo un cerillo y
prendo una lámpara a gas que la tenemos para momentos como estos, me dirijo
a mi cama si a eso se le puede llamar así, solo es una cama con tablas y paja
que lo cubre un manto. Es mejor estar sentado que acostado, al sentarme y por
un largo tiempo y rompiendo el silencio un suspiro y una frase entristecida de
mi voz
- Donde estas mamá, tengo miedo a la oscuridad
Me quedo contemplando la luna, bajo la cabeza entre mis rodillas cuando de
repente tocan a la puerta.
- Sera mamá ¡MAMÁ
Me dirijo a la puerta y escucho la voz de esa chica preciosa que me beso esta
tarde, abro y le sonrió y le pregunto.
- Que haces aquí?
- Ps mi familia salió y se fue la luz y tuve miedo de quedar sola en casa, puedo
pasar me contesto
- Claro pasa
Se dirigió a mi cama y sentó, me siento al lado de ella y le pregunto
- Me puedes decir tu nombre
- Me llamo Keith
- Puedo hacerte ahora yo una pregunta a ti?
- Si, dime
- Porque decidiste invitarme a caminar después de clase a casa?
- Bue-e-no ve-e-ras yo – yo – yo No supe que decir aquella pregunta
- (jajaja) Ay Alexander
- Y porque te iba a golpear a Maximiliam?
. Él siempre me molesta no me deja en paz
Ella me agarra la mano y me dice:
- No vuelvas a temer yo te protegeré lo juro
Quedo emocionado e impactados por esas palabras es hora de hablar y decir lo
que siento
- Tu-u me-me Gu-gus-tas ME GUSTAS LO DIJE ME GUSTAS KEITH Ella sujeta mis manos, y me da lentamente 2 besos uno en la frente y uno los
labios
- También me gustas Alexander
Conmocionado por sus palabras la abrazo fuertemente.
- Estaba necesitando a alguien como tú, que apague mi soledad que vive en mi
interior, gracias por aparecer en mi vida una lagrima se escapa de mis ojos en
se momento.
Me acuesto con ella en mi cama y temblando me dice;
- Tengo frio Alexander
Estiro mis manos para alcanzar la sabana que se encontraba en mis pies, la
arrojo sobre su cuerpo pero me doy cuenta que tiene un agujero grande por el
centro.
- Mejor nos abrazamos así nos damos calor
Ella me da la espalda y me dice
- Vamos abrázame
Tímidamente pongo mi mano alrededor de su torso, fue un mágico momento me
sentía al lado de un ángel su presencia logro calmar mi impaciencia por mi
madre pero aun la extrañaba pero era menos la ausencia gracias Keith.
Después de un tiempo la electricidad regreso y Keith decide irse a casa
- Buenas noches Alexander, sueña con los angelitos
- Mejor sueño contigo Keith
- Ay Alexander me da un beso en los labios y se marcha
Es mi primer beso de buenas noches que no me lo da mi mama y menos en los
labios.
- Ah ahora si dormiré de maravilla
Me acuesto, y al pasar las horas siento que mi madre llega y me dice que la
disculpara por su ausencia, pero no contesto nada y me hago el dormido. Ya me
estaba dando igual las llegadas tarde mi madre; de pronto deje de sentir algo
por ella será mejor no llorar por ella, cierro los ojos nuevamente y vuelvo a
dormirme.