Un típico día entre los peleadores, pero debemos recordar la definición de normal en ellos:
Dan estaba entre un basurero a su alrededor y al parecer insultaba a un videojuego por ser tan difícil para que el "maestro de los juegos" lo pudiera terminar, Mira estaba escuchando música a todo volumen mientras bailaba exageradamente, Ace la miraba con cara de "esta loca", Lync se hacía el enojado con Keith debido a su falta de atención por vigilar a su hermana, Keith se debatía mentalmente si parar el desastre de Mira o ir y disculparse con Lync por ignorarlo, y Shun solo miraba el peculiar panorama que se había formado detrás de la barra de la cocina. Donde al menos el estaría seguro.
- Mejor buscaré algo de comer- se mencionó a sí mismo para levantarse del banco donde estaba sentado y girarse a la nevera. Miró dudoso su contenido y nada le pareció de su agrado –Ese idiota de Dan, más vale que la próxima vez el vaya a comprar- mencionó con una expresión notable de fastidio en su rostro.
Ace giró y de reojo miró a Shun que seguía algo aburrido, así que se armó de valor y se decidió acercarse a él, pero algo o alguien lo distrajo.- Oye Ace, ¿A dónde vas?- preguntó inocente Lync. Quería matar de celos a Keith, si él lo ignoraba tendría que forzarlo a prestarle atención.
- Etto… ¿Qué quieres?- fue directo el peliverde, nunca cruzaba palabra alguna con el menor del grupo a menos que necesitara algo.
Lync dirigió su vista detrás de Ace y miraba a un rubio con una mirada asesina dirigida al ojinegro. El pelirosa lucho para no reírse, de lo contrario sus planes de tortura se verían arruinados.
- Realmente nada es solo que… me pareces lindo- mencionó con las mejillas falsamente ruborizadas. Ace retrocedió unos pasos y de la nada fue arrastrado hacia uno de los corredores. Lync encogió los hombros sonriendo y se giró para irse.
- Te mataré, te mataré, te mataré- gritaba fuera de sus casillas Keith. Ace lo miró confundido y al en un descuido retiró la mano del ojiazul de su boca. Antes que pudiera decir algo él lo interrumpió –Si no dejas a Lync, te mato- agregó amenazante para soltarlo e irse con su dignidad restante.
- Y a ese… ¿Qué le pasa?- dijo para sí el ojinegro mientras sobaba su cuello.
Rápidamente se dirigió a la cocina buscando señales de vida del moreno. Nada. Parecía que la tierra se lo había tragado.
- Tenía que ser ninja- maldecía en voz baja. No se había percatado que Dan lo había estado siguiendo hasta que el castaño notó que Ace cargaba consigo una paleta de caramelo sabor chocolate e intentó quitársela.
- Que demonios haces aquí- dijo dándole un golpe en la cabeza. Dan cayó de repente al suelo y comenzó a sobarse la parte afectada.
- Solo quería la paleta… además ¿Qué haces tú con eso?- cuestionó Dan. El peliverde se puso tenso, pues sabía a lo que el ojicafé se refería –Tu odias el chocolate… lo únicos que comemos chocolate de los chicos somos yo y Shun- mencionó Dan aún confundido.
- Ya sé… pero esto es mío y no quiero más preguntas- dijo el acusado para luego irse ocultando el rubor que aumentaba en sus mejillas.
Keith caminaba frustrado en los pasillos hasta que da con el pelinegro que miraba a la nada. Realmente era normal verlo así, pero no con una expresión de duda en su rostro.
- Hola Shun- saludó el rubio capturando la atención del moreno. Este solo lo miró y regresó su vista al vacío.
- ¿Qué haces aquí?... ¿No deberías estar con Lync?- mencionó lo último con cierta burla. Keith se sonrojó fuertemente -¿Entonces no lo niegas?- rio Shun.
- D-De hecho… creo que Lync está molesto conmigo- confesó Keith con la miraba gacha. Shun arqueó la ceja, debía haber un motivo por el que le está contando eso – Y quería pedirte que me ayudes – rogó le rubio.
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Bakugan one Shots
RandomA quien verán pequeñas historias de cada pareja que hay espero que os guste