Capitulo 2

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Después de estar casi toda la mañana en el hotel, pasando el mal rato de anoche decidimos ir a la playa a tomar el sol

Nos hacemos en un par de sillas bronceadoras

Pero después de un rato bajo el sol me siento como pavo en el horno

- Chicas no se ustedes pero yo quiero entrar al mar un rato

Digo sentándome

- Ve tu, la sal me irrita

Dice Sammy

- Y vienes a la playa, eres increíble Sam

Me levanto de la silla

- ¿Y ustedes?

Pregunto a las demás

- En un rato

Dice Becky mientras mira coqueta a un chico a unos pocos metros

- Yo paso

Dice Jenna, Gema esta simplemente dormida, se quemará

Camino sola hasta el mar, en verdad amo el mar, crecí visitándolo muy seguido y es parte de mi vida

Me adentro un poco más hasta que mis pies ya no toquen la arena, estoy realmente relajada hasta que algo me jala de la pierna y me lleva hacia abajo con fuerza, intento abrir mis ojos para ver pero la sal en ellos es insoportable, nado como puedo hacia arriba y antes de llegar siento unos brazos alzándome como bebé

- Hola

Escucho una voz más bien familiar, con mis manos quito el agua de mi cara y logro abrir los ojos para encontrarme con el acosador de anoche

Pateo hasta quitarme de su agarre pero al buscar pararme algo me genera un fuerte dolor en mi pie, impidiendo que nade, él me alza de nuevo

- Calma, no te voy a hacer nada

Dice muy tranquilamente

- Me duele

Levanto mi pie y lo hallo un poco rojo, él se ríe

- ¡No te rías!

Me exalto un poco

- Es la vegetación de este lugar, cuando siente amenaza ataca ¿no viste el letrero?

Lo señala con su cabeza, ahí hay un letrero flotando en una boya

- Joder...

Duele un montón

- Eso te pasa por ser tan inquieta chica sexy

- No me digas chica sexy y acércame a la playa

Le ordeno a gritos

- ¿Que me das a cambio?

Dice con sonrisa picara

- Una patada en los huevos

- ¿Con ese pie?

Mi rabia aumenta igual que el dolor

- ¿Estaré bien?

Pregunto mirando mi pie que cada vez es más rojo

- Lo estarás, se te quitará el dolor en un par de horas y ese color rojo pasará en unos días

Suspiro un poco aliviada

- ¿Quieres dinero?

- ¿Para que? ¿Para que te lleve allá?

- Si

- Pues no

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