Me desperté hacia las 2 de la tarde. Me levanté de la cama y me asomé a la ventana. Brillaba un sol resplandeciente, y el calor se colaba en mi habitación. La gente se refugiaba del calor bajo las sombras de los árboles.
Oí los gritos de Keila desde la cocina. Al parecer ya había hecho la comida y estaba a punto de venir a echarme agua por encima para que me levantase. Era muy madrugadora.
Me di una ducha rápida y entré en la cocina. Ninguna de las dos comíamos mucho, asi que con una ensalada para las dos era suficiente.
Después de comer no pusimos el bikini, unos shorts y una camiseta sencilla y nos fuimos corriendo a la playa. Depués de vivir toda la vida bajo las nubes de Londres, poder ir a tomar el sol todos los días era un sueño que queríamos aprovechar.
Era sábado y, por lo tanto, la playa estaba abarrotada. Pusimos nuestras toallas en una zona algo alejada, para evitar que nos molestaran, y nos tumbamos a tomar el sol y charlar.
Estaba a punto de quedarme dormida al sol cuando sentí un balón, probablemente de voley, golpeándo mi cabeza. Me levanté hecha una furia buscando al dueño cuando escuché unas voces a mi espalda. -Perdona guapa, ha sido sin querer. -¿Nos devuelves el balón?
Me giré, con Keila ya a mi lado y casi se nos desencajó la mandíbula. A unos diez metros, todos sin camiseta y luciendo sus radiantes sonrisas teníamos a los 4 miembros de 5sos.
Bueno os dejo el segundo capítulo. A partir de ahora intentaré subir más seguido. Gracias a las que leeis. Si os gusta pasarselo a vuestras amigas, compartirlo en tw o lo que sea. GRACIAAS
