Me duele alejarme de ti (Versión vieja)

Capítulo 14 "Recordando el tiempo"

4 años después: 

En estos años, lo único que cambió fue que mi tía Paola, y el padre de Tania, se casaron, me alegre muchísmo y me lloré cómo una loca.Eric, me odiaba por completo, Tania y yo volvímos a ser las mejores amigas, lo cuál eso no afecto su relación con Eric, por suerte.Ellos, irían a hacer un curso de 1 año o más a España, Madrid.. Para cambiar un poco de ambiete, que siempre viene bien un cambio; Me alegré por ellos.Por otra parte, Nicole me pidió ayuda para terminar de planear su boda con Dan, le prometí no llorar, pero sabía que era imposible. 

FInalmente yo y Ciro, estuvimos pasando todo el rato juntos, amándonos, cómo antes, cómo siempre; y planeando nuestra casa, y digo nuestra porque Paola y Marc, el padre de Tania.

Pasaron los meses, fueron los mejores de mi vida, me había propuesto elegir una carrera, que empezaba en él cuál nos hacían elegir una profesión, debíamos elegir con cuidado, porque pasaríamos bastante tiempo estudiándola. 

-Chicos, antes de que tengan los 20 minutos para elegir la carrera, tengan cuidado, y suerte, los extrañaré- anunció el profesor, conteniendo las lágrimas. 

Asentimos con la cabeza, y algunos compañeros se acercaron, Ciro estaba en mi clase, así que le dedique una mirada interesada.Me devolvió el gesto y me dedico una sonrisa. 

Era tiempo de elegir, yo iba a elegir la carrera de biología y ciencias, yo amaba la biología, desde el primer año de secundaria. A Ciro le daba igual, así que eligió la misma, para que estuvieramos juntos, ya volvíamos a la rutina de hace unos años. 

Eric, elegió comunicación, Tania Periodismo; aunque prácticamente tenían algunas materías juntos.Lo que me preocupo fue Selena, había desaparecido, solamente vino a complicarme la vida, y se largó, eso me tranquilizo.

Me acerqué a Tania, que estaba hablando con Nicole. 

-Te vamos a extrañar, Tani, eres muy importante para nosotras- dijo Nicole.

-Basta, no me digan más nada que me emocionaré y no podré ir a ningúna parte-respondió Tania, sollozando. 

-Me toca a mi decirte algo, sabes que puedes contar conmigo, para lo que sea, después de tantas cosas y peleas que hemos pasado, creo que de verdad eres las mejores de las amigas, y te deseo lo mejor, a ti y a Eric- le dije ya llorando. 

-Ay, ¡Honey!- Hacía tanto tiempo que no escuchaba ese ápodo, que me emocioné aún más, y nos abrazamos. 

Se nos acercó Ciro, lo cuál me produjo sentirme más sentimental.

-Espero no interrumpir, su despedida, pero sí Tania, quiere llegar a su vuelo, es mejor que nos vayamos ahora- nos dijo, haciendo una sonrisa tierna.

-¡Es verdad! ¿Eric, esta allí, verdad?- 

-Sí, cómo te vió que te hablaban ellas, no te quisó decir nada- 

-Ciro, tiene razón mejor nos vamos- 

No dije nada, no me salían las palabras, hasta que Ciro se acercó y me susurró un cálido "te amo".Me estremecí y le respondí, que yo también lo amaba.Nos subimos a su auto, y fuimos camino al aeropuerto, había poco tráfico por suerte, porque faltaban 30 minutos para que saliera el vuelo, y debía tener tiempo, para poder estar más relajada, y sin apuro. 

Nos abrazamos todos, pero antes de que se marcharán, me separé del grupo y me acerqué a Eric.

-¿Puedo decirte algo? en.. privado- le dije tímidamente, y el sólo me miró y asintió con la cabeza. 

Nos alejamos un poquito, y Ciro me miraba, lo volví a mirar, y le hice un gesto para que supiera que todo estaba bien. 

-Bien, dime Hannah, ¿Qué sucede?- me pregunto serío y con un tono frío; cruzando los brazos, lo cuál me hizo mirarlo de tal manera, cómo sí mirandólo ya le diría todo, o eso es lo que sentía, pero 4 años después de todo eso, no me había perdonando, eso me hizo sentir que fuí miserable y me aproveché de sus sentimientos, pero era verdad que yo lo amaba, pero también era verdad, que aún amaba a Ciro. 

-No sé sí aún sigas enojado conmigo, tienes toda la razón del mundo, pero ya te vas, y se que es tardé, siempre reaccionó tarde de las cosas.Pero te pido que me perdones, ojalá entiendas, que yo amaba a Ciro, pero en ese momento, también a ti, no quería hacer nada absolutamente nada, para lastimarte, y creo que es bueno que lo sepas; no quiero perder el contacto con una gran persona, cómo eres tu- Me miró, y no dijo nada por unos segundos. 

-Dime, ¿por qué te importó tanto? ¿te cuesta tanto dejarme ir? sigo sin entender, que soy para ti- 

Eso me hizó creer que aún seguía enamorado de mí, pero intentaba desviar esa idea, no podía ser posible, otra vez, entre la espada y la pared, no. 

Lo miré. 

-¿No me vas a responder?- 

-Sí, pero... lo dices cómo..-  Y antes de qué pudiera terminar la oración, el comenzo a hablar.

-¿Sí aún estuviera enamorado de ti? la respuesta es sí, aún no te he olvidado- 

-Eric, tengo novio, y tu tienes novia.Y nos aman muchísmo, no es posible- 

-No te estoy pidiendo que seas mi novia, Hannah.Simplemente quiero que me digas, que desaparezca de tu vida, o qué me quedé y podamos ser aunque sea amigos.-

No le respondí, y avisaron por micrófono que el avión de la línea C, ya iba a patir, entonces, se limitó a hablar él. 

-Eso lo dice todo, Hannah, solamente quiero que sepas, que te he amado, y lo sigo haciendo- 

-No, tu debes amar a Tania- 

-No puedes decirme que hacer, cuándo nisiquiera hace unos años, tú lo sabías- Y se marchó, fue una despedida agría, con un beso en la mejilla y un frío abrazo.

Me fuí hacía dónde estaba Ciro, y los saludamos con la mano, Nicole ya se había ido, porque no quería sufrir más viendo cómo sé iban. 

- ¿Qué te dijo ese idiota?- 

-Nada, ¿por qué lo dices?- 

-Tienes una cara, terrible, cariño- 

-Es que lo de Tania, me entristecé, demasiado- 

-A mí me puedes decir la verdad- 

Desvíe la mirada, hacía la ventana de allí, miré cómo se iba él avión, pregutandóme, que pasaría, sí seguiría con él, y el último avión que vería irse, hubiera sido el de Ciro.Comenzó a llover, el clima de New york, siempre es muy variado. 

-Me dijo, que me amaba, y yo no sabía que decirle y se marchó- 

-¿Tú sientes algo por él?- 

-No, simplemente, me da pena, pero lo lastime, y no entiendo cómo puede seguir enamorado de mí-

-A veces nos aferramos a lo que nos hace daño- 

-Siempre me pasa- 

Tenía razón, siempre me aferró a los qué me hacen daño, o a lo que me hace daño, y eso me cansa demasiado. 

-¿Estás bien, no?- 

-Sí, pero la voy a extrañar- las lágrimas brotaban sólo de mis ojos, pero no era por tristeza, estaba feliz por ella, ilusionada.

Ciro, me abrazo, y subímos a su auto, me estuvo diciendo todo el camino, lo mucho que me amaba, y que Tania iba a estar bien, cosas que ya sabía, pero me hacía bien escuchar, nunca está demás. 

Cuando llegamos a casa, mi celular empezó a sonar, era Tania, y estaba llorando.