Olvidarte.

Falso amor. I

Tengo frío y estoy divagando en mi melancolía. Estoy lastimándome mental y físicamente. No sé donde tengo que ir, tengo miedo a donde me lleve la vida. Me siento una pequeña rosa que está apunto de marchitarse. Y de amor.

¿Acaso no me vez agonizando? Me estoy suicidando por un amor enfermizo y no veo la cura en ti. Veo que no me agradas del todo, no me encantas del todo como solía decir, pero si veo que moriría sin ti. Ahora me vez tirada en el suelo llorando lágrimas de dolor y no haces nada que seguir mintiéndome con tus falsas ilusiones.

¡Deja de abrazarme! Me siento débil a tu lado, me siento pequeña en tus brazos.
Solía ser fría hasta que me volviste vulnerable y ahora en vez de hielo, hay rosas negras que solían ser rojas en mi corazón. Rosas que se marchitan a medida que me vas dañando. Rosas que desean no estar nunca más situadas allí.
Nunca sentí algo tan igual. Eres tan extraño que me causas tantas cosas, y más cuando estás cerca; produces sensaciones extrañas que se manifiestan en mi estómago y la tonalidad de mis mejillas se vuelven ardientes y rojizas. Lo notas y sonríes.

Te amo maldita sea. Estoy sufriendo, llorando por siempre, estoy sola presenciando tu despedida.
Juraste quedarte y no lo hiciste. Ahora veo como me desprecias y tiras a perder todos mis sentimientos.
Sentimientos destrozados por ti.

Estoy débil, creo que al fin moriré.
Veo la vida repetir el pasado y el tiempo no para. Te veo a ti, mirándome serio y caigo en esos encantos que son como una pequeña magia en ti.

Que encantos mi amor.
Tus encantos que sólo yo logré descubrir y entiendo por qué. Nadie quería salir lastimado, y yo me aseguré que nada de eso iba a pasar en mi; me enamoré, y aquí estamos, agonizando de amor.

Juega con mi cuerpo, por favor, dejame sentir tu piel en mi piel, ámame de una vez y besame apasionadamente como haces siempre.
Dime que me amas y sientete orgulloso por tus buenas mentiras, que sin querer, yo creo. Dime que nunca te alejaras y alejate como siempre hiciste. Abrazame por última vez y deja propagar tu calidez en todo mi cuerpo. Hazme feliz con tus mentiras y falsos besos. Si la verdad... Yo me dejé lastimar desde la primera vez. Yo me dejé sentir inútil.

¿Qué hay de perder ahora? Mi corazón está destruido y lo único que necesita es tu calor que se siente como una dulce miel que se desparrama en las grietas causándole cosquilleos agradables y cómodos, para remediar algunos que otros pedazos que pronto se quebraran de nuevo.

Notaste mi mirada cansada, me negué. Estuve toda la maldita noche llorando por una persona que seguramente estaba durmiendo como una persona normal.
Estoy llorando lágrimas de sangre en ésta oscura noche, derramándose por doquier en la habitación. Sólo abrazo la almohada e imagino que estás aquí, conmigo.

Si mi amor no es suficiente, espero que encuentres justo lo que necesitas. Pero creo que eso te será imposible, por qué, lo di todo de mi, te amé como la primera vez, me dejé ser tuya, y di mi prueba de amor.
Te amo y eso no es demasiado para ti.
Te quiero y lo desprecias.
Te necesito y te alejas.

Deja de lastimarme, o mi alma se verá totalmente muerta en un cuerpo que respira.

No pido que me ames, sólo que te alejes y no vuelvas. Por que si vuelves no tiene sentido, no me amas, lo dijiste serio y firme, ¿qué esperas? Vete a arrasar  sentimientos de otra persona y promete no dejarla agonizando como a mí.
Vete a ser feliz como tanto quisiste.

Sólo... Sólo no vuelvas.

¡Y lo haces de nuevo! ¡Maldita sea!

Nos miramos a los ojos tratando de hayar reconciliación y encantada quedo fija en ti.
Nos pedimos perdón y lloramos.
Nos abrazamos y nos decimos "Te amo".

Y así es como mi corazón... Se vuelve a agrietar lentamente.

Dime mentiras bonitas, dejame volando en el aire. Rescata de mi esperanzas de amor y usalas en mi más perdición. Navega en mí, en busca de misterios y secretos. Encuentra refugio y cariño. Quedate el tiempo que quieras, estoy aquí para ser usada de nuevo.
Abrazame lo más fuerte posible y dame más de tu falso amor. Mirame a la cara, y presiona tus labios contra los míos.
Toma de mi lo que quieras, si ya estoy rota y casi vacía.
Toma mi cuerpo y con todo el deseo, dale amor. Dale tu amor sagrado y cálido en el cual yo siempre creí.
Besa mi cintura y mis rollitos de chocolate. Dime que estoy bien y no necesito cambiar.
Toma más de mi dulce y querido amor que tanto te doy.
Di que me amas, por favor.

Pero olvidaba algo importante.
Ya no estás para actuar.
Sólo dejaste tu falso amor en las grietas de mi destrozado corazón.