Querido Profesor

Capítulo 4 -¿Viajaremos juntos?-

  Capitulo 04.- "Querido Profesor"

—Vale, vale... no me des explicaciones. —Suspiró ella esta vez— Lo intentaré, pero no te aseguro nada, ella te odia... y me pensaba que tu a ella.
—No, solo la hago enfadar... es que me excito cuando hace eso.
—Louis, por dios...
—Venga, ______, ¿me dirás que yo no la pongo ni un poco a ella? —Se apartó e hizo un gesto, señalándose el cuerpo. Y si, estaba bueno. El líder del equipo de futbol tenía un cuerpo trabajado—
—Seguramente. Aunque nunca me ha dicho nada... —alzó la vista— Pero eres su tipo... físicamente. —Terminó la frase para que no se hiciera ilusiones, más allá—
—Entonces tengo las de ganar... ¿qué tal mañana por la noche?
—Lo intentaré... mañana por la mañana te digo algo. —Miró hacia al lado. Una Harley Davidson del último modelo estaba aparcada, apoyada en el muro de la escuela—
— ¿Te llevo? —Louis se sentó en el piloto y encendió el motor de la moto— Deja tu escúter aquí, mañana me la llevo. Sube. —Ella lo hizo, poniéndose su casco. Y se perdieron a toda prisa por la ciudad, en ese hermoso atardecer—

[...]

Liam negó con la cabeza, dirigiéndose a su escritorio para recoger todo.

—Quizás es su novio. —Pensó en lo de esta mañana— No, no puede ser —rio— esta mañana han tenido un enfado de esos... —metió los libros en su cartera, junto con la carpeta— ¿pero por qué me preocupo? —Bufó— Liam, es una alumna.

Bajó las escaleras, saludando a la señora de la limpieza. Se metió en su coche y se fue a su casa, metido en esos pensamientos. En esos pensamientos, donde ______ era la protagonista.

[...]

—Gracias. —Dijo _______ bajándose de la moto—
—De nada —se acercó a ella. Le dio un beso—
— ¡Louis!
— ¿Qué?
— ¿No querías una cita con mi mejor amiga?
—Sí, pero eso no quita el hecho de que deje de pensar lo contrario de ti. —Sonrió y arrancó— ¡Nos vemos, _______!

_____ Entró en casa.

— ¿Hola? —Nadie contestó. Se metió al edificio— ¿Mamá?

Su madre estaba sentada en el sofá, durmiendo. Le dio un beso en la mejilla.

—Ah, hola, cariño... —dijo su madre con un tono cansado— Lo siento, no escuché la puerta...
—No te preocupes. —Le sonrió— si estas cansada, duerme.
—No, no... tengo que hacer la cena... tu padre llegará pronto.

Tu padre... tu padre. Resonó en la cabeza. Ojalá Logan se perdiera por la ciudad y no tuviera que llegar nunca. Aunque eso haría más daño a su madre que cualquier discusión. Lo sabía perfectamente.
_______ se despertó a las seis. Tenía que coger el bus, ahora que no tendría moto durante una semana. Se alistó y cogió la T10 donde aún quedaban cuatro viajes. Su madre dormía. Mientras que su padre roncaba, en el sofá del salón. Siempre que discutían, él dormía allí. Pero esta noche, estaba tan cansada, que no había oído nada. Cerró la puerta con precaución y se colgó bien la maleta en la espalda. Fue a la parada del bus. Pronto llegó.

—Buenos días. —Dijo el revisor—
—Buenos días. —contestó ella. Y metió la tarjeta por el aparato, que pronto le tachó otro viaje menos—

El estúpido conductor, no se esperó a que ella tomara asiento o se agarrara a algo. Arrancó. De la presión, ______ se tambaleó y chocó contra alguien.

—Huy, lo siento.
—No... no pasa nada. —Ella se sonrojó al ver quién era— ¿_____?
—Ah... hola Liam... —Le sonaba más a compañerismo que a una relación de "profesor-alumna" ese nombre— profesor... —rectificó—
— ¿No tenías un escúter? —sonrió él, agarrándose a la barandilla de arriba del autobús—
— Si... pero ayer me encontré las ruedas pinchadas... y hasta que Louis no me la arregle... —ahora Liam aclaró todo. Por eso estaban hablando ayer. Lo que no entendía, es porque le daba vueltas y vueltas a esa chica— ¿Y tú no tienes coche?
—Si... pero ayer... —rió por la casual situación— Mi hermano Zayn lo cogió... volvió bebido... y bueno ya sabes, las cosas que pasan. Mi coche está en el taller.
— ¿Así que nos vamos a ver durante estos días en el bus, no?
— Así es. —Sonrió—

El bus se iba llenando. Cada vez más apretados. A ______ se le cayó la T10 al suelo. Se agachó para buscarla. Liam se sonrojó, al ver su trasero en frente suyo. _______ no encontraba la T10, y para colmo el autobús se movía. Casi se cae. Liam la agarró por la cintura. Él tuvo una erección instantánea, esa parecía la postura de "la sorpresa". Y ______ la sintió. Enorme, clavada en su trasero. A la mierda la T10. Ya compraré otra. Se mordió el labio ante la fricción que hacia el pene de Liam contra su nalga. A pesar las ropas, ella la notaba. Pues eso le dio paso a la imaginación... Liam lo tenía grande. ______ recordó el comentario de Eleanor.
«Deja de ser un tostón» Y eso es exactamente lo que haría. De vez en cuando podía ser madura por su edad. Pero otras, podía ser salida, tanto como Eleanor. Volvió a rozar su trasero contra la erección de Liam. Ahora adrede. Y él lo supo. Se acercó a su oreja.

—No vuelvas a hacer eso... —Dijo, casi perdiendo el control. Aun que de verdad, quería volver a sentir el roce del trasero de _______ contra su pene ya endurecido—
— ¿Y qué hará al respecto profesor? —Empezó a hablarle de usted, eso lo excitó aun más. Los pezones de _______ sé irguieron— ¿enviarme a detención? ¿Castigarme? —ahora pasó toda su mano por allí. Liam tembló, las piernas le fallaron— Oh si... castígueme. —Gimió bajito ella—

Liam le cogió un muslo y la apretó contra él. Empezó a meter su mano por la falda tejana. Había tanta gente que aparte de apretados, los tapaban por completo. Nadie se enteraría de nada. _______ abrió las piernas, y le dio el paso que necesitaba.

—Mmm... ¿Has visto lo que has hecho? —Gimió en su oído, asegurándose de que su erección quedara entre pierna y pierna de _______— Puede que si te tenga que castigar...
—Por favor. —Se giró y le susurró a la oreja. El ambiente se había puesto a arder en pocos minutos—

Liam se empalmó más al sentir que ella ya estaba mojada... al despegar el hilo del tanga de aquella hendidura y rozar su índice donde sabia, exactamente, que a ella le daría el máximo placer. ______ se mordió el labio, sintiendo como los dedos de Liam entraban y salían de ella, sin ningún miramiento, sin parar. Evitó gemir, mordiéndose la parte interior de la mejilla. Pronto sintió el gusto metálico de la sangre que le inundaba la boca. Iba a correrse.

—Liam... —dijo ella— ¿Liam? ¡Profesor! —Él se sobresaltó del asiento— te quedaste dormido, hemos llegado.

Él se inclinó en la silla. Suerte que llevaba la chaqueta a la altura de la cintura. Intentó que la erección, causada por el sueño se bajara rápido. Se levantó.

—Oh... lo siento.
—Nada... es normal, a esta hora, cualquiera se duerme. —dijo ella bostezando. Se giró, él fue detrás de ella. La observó. Si, solo un sueño. Aun que como le hubiera gustado no despertarse—

[...]

Martes por la tarde. La clase de gimnasia, a veces muy aburrida y dura, y otras simple y divertida. Depende como le cogiera a Chase. Hoy estaba de buen humor, así que prácticamente, iba a ser divertida.

—Bueno chicos, hoy haremos un juego deportivo... —miró a todos en general, con aquellos ojos casi negros que tanto incitaban a algunas. Era un hombre de unos treinta años, y los tenía súper bien puestos. Sobre todo en ciertos sitios. Sonrió y botó la pelota— A matar.

Todos los chicos sonrieron. Era un juego que les encantaba. Tirar la bola, dura, hacia cualquier persona para ir eliminando.

—Vamos a hacer dos grupos, los quiero mezclados, tanto chicas como chicos. Vamos a ver... —miró— Eleanor, una de las capitanas. —Ahora muchos chicos levantaron la mano. Que infantiles—
— ¡Yo! ¡Elíjame a mí!
—No, ¡a mí, Chase!
— ¿Quieren callarse? —Miró en general— Elegiré a otra chica... más bien, ¿Eleanor, a quien retas? —
--Elijo a...   

¿A quién elegirá Ele? Comenten que tal les parece...