oneshot itasaku

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EL CAMUFLAJE DE TUS OJOS

Lo escucho hablar por teléfono de nuevo, aquellos susurros de nuevo, esa sonrisa en su rostro que solo era dedicada a mi vuelve. Pasa una mano en su cabello y asiente mientras dice algo que no logró escuchar. Trató de contener alquel temblor en mi mano y mi mal humor que va en aumento.

Veo la forma de sus labios al querer contener una carcajada. Me miro en el espejo que esta detrás de mi y trató dé poner mi sonrisa encantadora, antes de salir a su encuentro.

--¿Cariño?- hago como si lo buscará por el salón.  Escucho otro susurro.

--Estoy aqui- me responde guardando su celular en su bolsillo.

Me besa la frente y veo la luz en sus ojos apagarse lentamente. Siento aquello que me  ha  rondado por días sin poder oponerme, aquel sentimiento de vacío pues no hay nada mas que sentir.

Comemos en silencio y no haces ningún esfuerzo por hacer conversación, o contarme tu día en la empresa, deberías tener mucho que decir,  después de todo eres el dueño. Quejarme es algo que no puedo hacer, yo tampoco toco el tema de mi noche ajetreada en urgencias.

Te pasas la mano tras la nuca y después me miras. Aquellos ojos color negro onix y ese largo cabello  que siempre atas en una coleta, aquellas marcas bajo tus ojos me tenían atrapada y fasinada, te miro tratando de decifrar lo que escondes de mi, o lo que crees esconderme. Suspiró mientras te sostengo la mirada y te sonrió de la forma en que lo hacía cuando venías por mi al final de mi turno para tomar un café, después de todo finguir es lo mejor entre los dos.

Es extraño recordar la manera en la que me buscabas apenas cruzar la puerta, casi olvido el entusiasmo en tus palabras cada que me contabas tu día. Aquel intenso amor que llegue a sentir como lava derritiendo mi interior a ido congelandose poco a poco.

Me doy una ducha mientras  tu ves el televisor y tomás tu celular cada tres minutos para responder algo que no me incumbe. ¿Y como lo se? Por que ese ha sido tu comportamiento desde hace 3 meses.

Sabía que estabamos mal, las peleas hiban en aumento cada vez mas, tus reclamos por los horarios de mis turnos en el hospital. Mis constantes excusas para no asistir a nuestras citas para almorzar juntos. Estaba  haciendo todo lo posible para estar bien contigo, estaba dando más de lo que podía, dividiendome entre el trabajo, la casa y tú. Salgo con mi uniforme de trabajo, aquel pantalón de franela que tiene dibujos de planetas y mis crows color violeta, tomó mi bolso con los cosas necesarias y té miro en el sofá con el celular en las manos, la sonrisa a aparecido de nuevo. Me acerco a ti y cuando paso mis manos por tu cuello, pones de inmediato el teléfono con la pantalla hacia abajo.

--Nos vemos mañana-  asientes y noto tu nerviosismo, te doy un beso en la mejilla y me alejo. 

Suspiró mientras bajo las escaleras para llegar a mi auto, a mitad del tramo me detengo sólo un momento para reprimir las gana que tengo de reírme de lo estúpida que me siento en esta situación.

--Olvidas esto-  tu vos me hace sujetar con más fuerza el barandal. --Estas distrida- 

Te regalo otra sonrisa de aquellas que ponía cada vez que decías amarme.

--Gracias,  hasta mañana-  no se que mas puedo decirte cuando ya lo he dicho todo

Voy camino al trabajo cuando recuerdo las discuciones, aquellas donde  me reclamabas "mi falta de interés en nuestra relacion"  sabíamos que seria difícil conseguir la vida que llevamos ahora, la comodidad que nos brinda una  buena posición económica. Parece que Olvidaste cuanto tiempo tuve que trabajar por ambos mientras tu cumplias el sueño de independisarte  y crear tu propia constructora.

EL CAMUFLAJE DE TUS OJOS oneshotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora