Capitulo 1

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Festival.

Respiro de manera suave y profunda, el aroma a pan caliente pronto inunda mis fosas nasales haciéndome sonreír. Con mi codo apoyado sobre el marco de la ventana y mi mentón sobre mi mano observo atenta. Hoy el pueblo luce sumamente feliz y dichoso, los niños juegan y los mayores organizan.

El festival Manawa

Pienso. Rápidamente me pongo en marcha sin vacilar de mas y salgo disparada hacia las escaleras. Quiero ver todo enseguida.

Sin tiempo de avisar a mi Padre salgo con velocidad y observo fascinada. Si, justamente la expresión que tendría una niña pequeña. Con un paso modulado y mi mirada a los lados comienzo a caminar y si, otra vez capto ese exquisito aroma a pan de canela.

-Buenos Días señora Morris -Digo al llegar a su panadería

Tan rápido como escucha mi voz se gira con la bandeja de panes recién salidos del horno y me dedica una cálida y amplia sonrisa.

-Lena, hola- exclama con el mismo tono vivo y activo del día a día -¿Lista para esta noche?

Asiento con suavidad. Suspiro.

-el festival Manawa es uno de mis festivales favoritos -Respondo

-Bueno- suelta una pequeña pero débil risa -De eso no hay duda

El festival Manawa; festival en el cual el pueblo entero celebra el destierro de las bestias infernales, Vampiros, hombres lobos entre otros. Pero esa noche hubo algo peculiar, entre esas criaturas había una familia residente del pueblo, Manawa. La cual nunca se hizo notar hasta esa noche. Nunca se supo que especie eran pero se rumora que al ver sus ojos, podías entrar en el mismo infierno.

Desde esa noche de 1864 se celebra hasta la actualidad. Hoy ya casi siendo 847 años, es una tradición.

-¿Y Derek? No lo veo en décadas -comenta bromeando

-Debe estar pescando

Y yo ayudándole

-Entiendo. Bueno no pierdas mas tiempo -murmura y me entrega una bolsa con pan fresco. Huele exquisito- hay un festival que preparar

Asiento nuevamente y tomo la bolsa que me ofrece. Finalmente le dedico una sonrisa y la abrazo por sobre el mostrador.

-Gracias señora Morris

Me despido a lo lejos.

-Cuida te pastelito
pensé

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Tras un rato de caminar por el pueblo y observar llego a donde mi padre.

Como lo pensé

Se encontraba pescando. Me acerco de manera sigilosa y observo atenta la manera en la que maneja la caña. Sin darle muchas vueltas al asunto tomo una caña y me dispongo a posicionar me a su lado.

-Rubia -musita

-Barbón -respondo

-¿soy yo o alguien tenía mucha prisa esta mañana?

Río de manera leve tomo la bolsa con los panes frescos paseando los de lado a lado delante de el. No obstante mantiene la postura en un intento de mantenerse firme, pero todo ello lo hacía en vano, tarde o temprano caería.

-son de Canela~

Finalmente termina por rodar los ojos y antes de que el mismo lo note ya tiene la bolsa en sus manos.

Mucho mejor

Los minutos pasan volando a su lado. Como era la costumbre; me encargué de ayudarle con la pesca, embolsar los pescados, llevarlos a la camioneta y de mas. También nos dispusimos a compartir los panes que minutos atrás la rechoncha abuelita me dio.

Tanto el como yo los disfrutamos, el sabor a hogar no se logra todos los días.

-Morris Aun no pierde el toque -Comenta

Asiento con afirmación mientras mordisqueo el pan. Los modales y yo no vamos exactamente de la mano.

-Lena -murmura- hoy se viene algo importante

-Si el festival Manawa.

Le miro y antes de que pueda responder el sonido de un caballo galopando capta mi atención. Instintivamente ambos nos giramos para ver de que se trata. Un jinete de cabellos platinos acompañado de su caballo color café yacen frente a nuestros ojos.

Trago saliva duro y miro con atención, su aspecto da aires de misterio y frialdad. Siento una mano en mi hombro, es mas que obvio que no dejo pasar desapercibido mi nerviosismo por lo cual mi padre intenta tranquilizar me. Con un paso suave y postura firme mi padre avanza unos dos pasos posicionándose frente a mi.

Ambos intercambian miradas y como si nada el jinete continua su camino. Suspiro algo mas tranquila.

-Sera mejor que vayamos a prepararnos para el festival -Murmuro

Asiente.

~~~

Las horas transcurrieron una tras otra y cuando menos lo noté, me encontraba en el festival. Una cosa está muy clara, todo se ve de completa maravilla. Antorchas yacían iluminándolo todo pero sin dudar, lo que mas resaltaba entre todas las decoraciones era la gran hoguera al centro del pueblo. Donde el alcalde daría inicio al festival encendiendo esta misma.

Miré la gran estructura, sintiéndome pequeña por unos instantes hasta que un inesperado agarre me sacó de mis pensamientos.

Sonreí al mirarle y salude como siempre "Barbón".

-Rubia

Tras unos minutos de espera y una danza bajo la luna todos los integrantes del pueblo se reunieron justo en el centro. Para dar inicio a tan esperada fiesta.

Con posturas firmes, relativamente con clase y distinción las autoridades se reunieron junto al alcalde en la hoguera. Tras dar el mismo discurso anual les brindamos un aplauso.

Unos ojos profundamente negros, cabellos platinos y una piel sumamente pálida se hacen presentes junto a la hoguera, posicionándose detrás del alcalde. Antes de que alguien pueda reaccionar todo ocurre de manera repentina.

Una daga enterrada en el cuello del alcalde y su atacante termina por degollar le, poco a poco este colapsa. Siento como el alma se me viene al suelo, el pánico se a desatado y el cuerpo del alcalde yace desangrándose en el suelo.

Está muerto...

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Bueno, sólo puedo decir que espero que lo hayan disfrutadovoten si les gustó e.e

-Jimena♥

Angelix La Reencarnación Del FénixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora