Clarity (Clark Kent//Superman)

The beginning of the future 04/01

Por primera vez dormí en paz.
Ningún sueño horripilante atormentandome como días atrás los tenía, estaba plena, no estaba cansada, por un momento me convertí una chica en su totalidad normal.

Anoche descubrí el lugar en el que estaba, siendo sincera le debo mucho a estas personas quienes fueron muy atentas conmigo e incluso cuidaron de mí al dormir.

El hombre, quién, anoche calmo mi angustia paso la noche sentado sobre una silla de madera con sus musculosos brazos cruzados, se notaba tranquilo, a pesar de la incomodidad que es estar ahí sin poder dar algún movimiento, sus facciones eran pacíficas, como un niño pequeño durmiendo, sonreí inesperadamente, algo en el me daba paz, solo dirigimos unas cuantas palabras pero el hecho de estar ahí cuidandome durante 9 días me dio esperanzas de que fuera un buen hombre.

Lentamente descubrí mis piernas de las sábanas que estaban encima de ellas, seguía con la misma vestimenta al parecer, me levante lentamente para no despertarlo, por fortuna un pantalón de mezclilla estaba sobre una mesa de madera con una lámpara al lado de la cama.

Detrás de él me coloque el pantalón, sali sin interes alguno ante la falta de zapatos cubriendo mis pies. Había un pasillo de madera estrecho que daba hacía otras habitaciones y unas escalera (del mismo material) que iban hacia la planta baja, tome ese rumbo dando pisadas lentas evitando los chirridos de estas, uno por uno, mi cuerpo no sentía la presencia de algo o alguien debajo, por lo que mi conciencia estaba tranquila.

Por las grandes ventanas lograba ver que apenas amanecía, los cantares de los pájaros resonaban con sinfonía, los rayos de sol chocaban contra el suelo de madera, ¿cuanto habré dormido?...

Me pasee sobre la cocina que ningún cuerpo habitaba ahí, de paso mire el refrigerador, tenía un hambre de los mil demonios, técnicamente comería lo que d tuviese a mi paso.

Había un par de plátanos, manzanas, mangos, carné, una olla que al parecer era sopa y un par de huevos. Tome al menos 3 objetos de cada grupo y salí por una puerta que daba hacia el patio trasero.

Lo primero que introduje a mi boca fue un trozo de manzana, el resto de frutas las puse en una bolsa de tela que encontré fuera, colgada de la puerta.

Sin conocer el camino, ni saber para donde iba llegue a un gigantesco jardín con inmensos huertos, cosechas de frutas y verduras, era el mismo paraíso, los animales parecían cantar a la par de las otras razas, en fin, una maravilla.

Con miedo y a zancadas lentas me acerco a un grupo de vacas que yacían caminando en un espacio amplio de hierva, algunas comían otras simplemente estaban en su mundo.

Una de ellas estaba con la cabeza fuera de una especie de muro, observándome fijamente.

-Hola cariño -Amaba a los animales, eso sí, eran una especie de segunda familia para mí, recuerdo que, cuándo era pequeña, papa o mamá me castigaban o regañaban en el rancho de mis abuelos, iba directamente hacía los caballos llorando de coraje imaginando que ellos me comprendían, sabía que no pero no me importaba, era una niña, sin experiencia aún.-

¿Como estas? -Acaricie su nuca con suavidad, con los nudillos de mis manos, ella pareció gustarle ya que cerraba los ojos mientras cometía la accion- Eres tan linda, ¿porque estas tan sola? Estas muy guapa, como antes no tuve la oportunidad de estar contigo.

Deje de tocarla, vi que miró la manzana en mi mano con inquietud -¿La quieres? ¿Tienes hambre?- Estire el brazo hacia su hocico, el sin pensarlo de un mordisco la consumió entera exaltandome.

Solte una risilla, me he de ver estúpida asustandome de esa forma, de nuevo con la palma de mi mano acarició su oreja izquierda.

-Eres fanática de los animales, ¿verdad? -Di varios pasos hacía atrás sorprendida al escuchar la voz frente a mi, era mi cuidador, bueno, el hombre.