ㅡ¿Qué película quieres ver?
ㅡNo tengo ganas de ver ninguna.
ㅡ¿Comemos algo?
ㅡNo.
ㅡEntonces, ¿Qué quieres hacer?
ㅡNada.
ㅡHazel...ㅡsuspiróㅡ ya no estés molesta. Soy un idiota, lo sé.
ㅡQue bueno que lo sepas, te felicito.
ㅡNo seas así...
ㅡPues no tengo otra forma de ser, mala suerte.
ㅡVen aquí, pequeñita.
Chris hizo un ademán con su mano para que me sentara en sus piernas. Yo seguía de pie en la puerta de mi habitación y él se encontraba sentado un mi cama con la laptop a un costado. Lo observé silenciosamente, dubitativa bajo su mirada suplicante. No hacía falta pensarlo demasiado, estaba más que segura de que sería una pésima idea ceder ante él. Que decir, una TERRIBLE idea. Aún así, mantenía una lucha interna conmigo misma. Una batalla entre el deber y el querer.
No lo hagas.
ㅡNo me mires como si fuese algo peligroso... venㅡsu gesto se crispó con tristeza y una punzada de dolor golpeó en mi pechoㅡ, Haze...
Mordí la uña de mi pulgar, insegura. Christian me miró con ojos de gatito desvalido y cerré los míos por inercia, porque una vez más sería débil. Jodidamente volvería a caer en este círculo vicioso, pero es que se veía tan guapo ahí, con su cabello desordenado y su nariz enrojecida debido al frío del aire acondicionado. En momentos como ese odiaba mucho el querlo tan fuerte. Me acerqué con pasos vacilantes.
Christian tomó mi mano y tiró de ella levemente para luego depositarme en su regazo como a una niña que busca consuelo de su madre luego de que su muñeca preferida se arruinara. Posó mi cabeza en su pecho y consiguiente a eso, empezó a dar suaves caricias mientras posaba su brazo derecho en mi cintura para sostenerme. Hice un puchero inconsciente.
ㅡSé que no debí hablarte como lo hice y lo siento. Tu comprendes bien el estado en el que caigo cuando tengo problemas en casaㅡhabló después.
Asentí con lentitudㅡ Pero... era mi cumpleaños, Chris. Me sentí fatal ¿lo sabías?
ㅡLo sé, lo sé Haze y lo sientoㅡse disculpó, en un tono de voz que me supo a remordimiento. Estaba siendo sincero, pero de todas formas algo no se sentía bienㅡ. Fue una reacción del momento, pero estoy arrepentido y estoy aquí hoy porque quería arreglar las cosas contigo.
ㅡSí, estás aquí...
ㅡ¿Quieres que me vaya?
Negué con la cabeza y enredé mis brazos al rededor de él en un abrazoㅡ No, quiero que te quedes. Supongo que estoy siendo dramática.
ㅡNo lo eres, solo estás siendo honesta conmigo y eso está bien. Por eso yo soy honesto contigo también, Haze, y creo que estoy dañándote demasiado.
Los latidos de mi corazón empezaron una marcha acelerada, con fuerza, temor. Todas mis alertas se encendieron en cuestión de segundos. Siempre que teníamos esta conversación nada bueno venía después. Este era precisamente el lado de Christian que nadie más que yo conocía. El lado que trataba de proteger a toda costa y que desde un primer momento nos había unido para no volver a separarnos.
«Míralo, diciendo algo que todos sabemos a excepción de esta inútil»
Nadie comprendía lo que teníamos ni jamás lo harían simplemente porque no habían presenciado nunca un momento como este.
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Wolf Always, Always Moon.
Romance¿Cuánto dolor eres capaz de soportar sólo por la persona de la que te enamoraste? Historia 100% original. Prohíbida su copia y/o adaptación.