capítulo único

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Chanyeol siempre se había considerado a sí mismo como un bastardo. Era sumamente inteligente y capaz, lo que le permitía mantenerse respetuoso delante de los mayores. Pero lejos de la mirada de la autoridad, él disfrutaba siendo un bastardo con sus subordinados.

Por eso, cuando reconoció a Byun Baekhyun como la sospechosa chica de la casa de gisaengs no dudó en acosarla y obligarla a someterse a sus órdenes. Fue realmente divertido ver su cara de asombro y temor cuando le dijo que sabía su secreto.

-No sé de qué hablas -respondió con altanería al tiempo que liberaba su brazo del agarre del más alto y se disponía a tomar su lugar para la segunda parte del examen de ingreso a la universidad de Seungkyungkwan.

-Por supuesto que sabes, eras aquella chica que escapó a hurtadillas de la casa de Gisaengs -Chanyeol vio satisfecho como Baekhyun perdía su altanería y lo miraba a los ojos por primera vez -De hecho, tengo mucha curiosidad por saber qué hacías allí esa noche y cómo puede alguien como tú estar hoy aquí. Estoy seguro de que los maestros y ministros estarán tan interesados en tus motivos como yo.

Baekhyun lo tomó por la manga de la túnica y fue el momento de Chanyeol de sonreír con suficiencia. Amaba ganar, someter a las personas con su astucia y autoridad. Y a Baekhyun ya le había ganado.

-Espera. No digas nada por favor. Yo puedo explicarlo to...

-No hace falta que me expliques nada, pero si quieres que guarde tu asqueroso secreto, será mejor que hagas todo lo que te ordene.

Y el joven Byun no tuvo más remedio que tragarse su orgullo y asentir con la cabeza porque si los ministros se enteraban de que se había disfrazado de mujer no le dejarían dar el examen y, en consecuencia, su padre le retiraría el apellido y lo echaría de la casa.

~♡~

Quizás hubiese sido mejor para Baekhyun retirarse y presentarse para rendir el examen al año siguiente. Después de todo, ni todas las reprimendas de su padre y la burla de sus amigos valían para soportar los caprichos del joven Park. El desgraciado lo tenía de arriba a abajo todo el día, incluso, había sobornado a uno de los maestros para compartir habitación con él porque necesito que tú mantengas mi bacinilla limpia.

Estaba seguro de que disfrazarse de mujer no era un crimen tan atroz como para vivir el resto de su vida limpiando las miserias de un noble que ni siquiera se preocupaba por llevar una dieta balanceada.

-Sabes, si comieras más fibra y bebieras menos alcohol, tus heces serían firmes y tu cabello brillaría más.

En momentos así, Chanyeol genuinamente se sorprendía de que una mujer fuera capaz de decir tantas groserías juntas en una oración. Él convivía, hasta no hace mucho, con dos mujeres en casa, su madre y su hermana mayor, y jamás las había escuchado decir ni media grosería.

Pero convengamos que el caso de Baekhyun es un caso atípico porque estaba rotundamente prohibido que las mujeres recibieran una educación fuera del hogar, y la joven Byun no sólo era una gran estudiante, sino que también era buena en la lucha cuerpo a cuerpo, el arco y flecha, la lucha con espadas y la equitación. Chanyeol no podía figurarse dónde en Joseon una chica pudo haber aprendido todo eso. Y tampoco encontraba una razón por la que una joven doncella tan bien parecida se encontrara en aquel momento estudiando en una universidad donde se formaban los más grandes eruditos y funcionarios del reino, a riesgo de ser descubierta usurpando la identidad de un hombre, delito que se castigaba con la muerte.

A diario a Chanyeol lo sorprendían observando a Baekhyun. Se decía a sí mismo que solo lo vigilaba para descubrir sus motivos para engañar a todo el mundo. Pero la realidad es que poco podría descubrir analizando su perfil, sus muecas y sus maneras. A pesar de su aspecto suave, Baekhyun era buena para fingir y, aún cuando los ademanes de sus finas manos eran algo exagerados, nadie podría descubrir a simple vista que era una farsa.

El Secreto de BaekDonde viven las historias. Descúbrelo ahora