Estoy aquí, sentada en el salón de clases. A veces parece como si las horas y los días pasaran tan lento y tan rápido al mismo tiempo.
Elisa, una de mis mejores amigas está tan ocupada jugando en su iPhone que ni siquiera me pone atención, supongo que piensa lo mismo de mi porque estoy escribiendote esto.
Mis amigos organizaron un tipo buffet hoy, fue muy divertido porque cada uno trajo comida y compartimos. Empiezo a creer que son las mejores personas del mundo.
También tengo algo que contarte, he estado tanto tiempo esperando para tener a alguien que me escuchara y bueno, aquí estás tú, aunque probablemente ni siquiera te importe.
Me gusta un chico, sólo te digo que me gusta porque no estoy enamorada de él, en realidad todavía no sé que es exactamente enamorarse de alguien, cada quien tiene su forma de hacerlo. Sí he tenido novio, el año pasado me gustaba un niño llamado Tony, y resultó que yo también a él, con el tiempo nos fuimos acercando y salimos, salimos y nos hicimos novios (escribí dos veces salimos, porque salimos mucho) pero duramos tan poco que ni siquiera puedo presumir esa relación.
Regresando al tema, este niño me gusta mucho. No sé como explicártelo pero es algo que ni yo misma entiendo. Sus ojos cafés siempre me dejan sin respirar, yo creo que por eso no nunca lo veo a los ojos. En realidad no es el niño más guapo del mundo, pero hay algo en él que siempre atrae a las chicas, me gustaría decirte que no soy una de esas chicas, pero aquí estoy, hablándote de él. Si tan solo supiera qué es lo que me gusta de él, qué es lo que me tiene así me sentiría mucho más tranquila. Él se llama Santiago.
No es el niño perfecto que salen en la mayoría de los libros que leo, él siempre está escuchando música o con sus amigos, incluso podría decirte que es popular. Definitivamente mi mundo no concuerda con el de él. Intento no ponerme triste, el tema del amor es un tema que a lo largo de los años le he quitado importancia.
Sé que suena muy frío, pero todo alguna vez termina, empieza siendo feliz pero al final parece como si esa felicidad nunca hubiera existido. No sé si me entiendas o estés de acuerdo conmigo. Espero que algún día llegue alguien que haga que cambie de opinión, y espero con muchas muchas ganas que sea él.
Con amor,
Erandy.
