Lo conocí una noche estrellada, mi amor floreció casi al instante, él era un ser de la noche, oscuro como ninguno; yo era todo lo contrario, jamás creí que alguien como él pudiera amarme, por eso intenté callar mis sentimientos, que él no se diera cuenta que mi corazón había conquistado.
Temia que me apartará que me rechazará, por eso calle mi sentir pero los celos me consumían cada que alguien se le acercaba.
Un día él se vio tentado a iniciar una relación con otra mujer, cuando él me lo contó mi corazón se hizo mil pedazos al pensar que lo había perdido, intenté alejarme para no sentir dolor pero todo fue en vano, él se dió cuenta de mi cambio, y como no hacerlo si eso de fingir nunca ha sido lo mío y después de tanto lloré y le conté que me había enamorado de él, creyendo que me rechazaría, que me alejaría de su lado pero no fue así, me dijo que intentaría corresponder a mis sentimientos; mi corazón palpitó, nunca antes había sentido tal emoción quise gritarle al mundo que era feliz.
Él no me amaba, me quería, pero eso me bastaba, que me dejara amarle, que me dejara demostrarle que lo adoraba. Pero aún no me pertenecía del todo, aún no podía llamarle mío aunque yo era suya, eso me angustiaba profundamente, pero un buen día, él me dijo aquellas palabras que lo cambiaron todo en mi vida.
"Te amo, ¿quieres ser mi novia?".
Todo mi mundo se detuvo, la vida me brindaba la segunda alegría más grande. Al fin era mío, al fin era suya, nada más importaba sólo él y yo.
Pasaron los días, y descubrimos nuestras diferencias, estás estuvieron a punto de separarnos pero no fue así, siempre volvíamos a estar juntos, nuestro amor podía con todo, nuestro amor era fuerte.
Después vinieron mis celos.
«Estúpidos celos»
Temía que aquella felicidad se acabará; él intentaba demostrarme cada día que esos celos eran mal infundados pero mi inseguridad hacia que desconfiara, no de él, sino de todas aquellas chicas que intentaban robarme el amor de mi amado, creía que alguna de ellas podría conseguirlo, me consideraba de poca valía creía no merecerlo. Pero él me decía cuanto valía yo, hizo que confiara en mi misma, sanó mis heridas, curó mi corazón, hizo crecer mi autoestima, me demostró que yo era a la que había elegido su corazón.
Pero tarde en sanar, me habían herido mucho, hasta el punto de querer morir. Pero él me dió una razón para vivir, para confiar, para reír. Sino lo hubiese conocido mi vida no tendría sentido, él fue la bendición con la que la vida me pagó tantas lágrimas derramadas, él fue mi salvación.
Aún asi de nuevo estuve a punto de perder a mi amado por mi tontedad pero él me perdonó, y prometí nunca más desconfiar, ¿por qué lo haría? Si cada día me demostraba que me amaba, que yo era lo más importante, que era a mí a la única que amaba.
Maldita distancia que no me permitía estar junto a él, aún así pese a todo cada noche lo sentía cerca, me dormía en sus brazos, me acurrucaba en su regazo.
No puedo prometerle mucho a mi amado, sólo prometeré que siempre me cuidare por él, que sus palabras siempre me acompañarán y cuidarán. Y sé que él luchará por algún día poder estar a mi lado y así poder seguir está historia de amor.
Hoy sé que nuestro amor puede con todo, por eso hoy sé que juntos podremos hacerle frente a cualquier cosa, a lo que venga, juntos podremos vencer.
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Taller de redacción #MechanicalAngelAwards2017
RandomÉsta obra se realizó para el taller de Redacción de la editorial Earth and Moon, cuyo objetivo es ayudar a los escritores a mejorar la calidad de sus escritos. El contenido de esta obra es variado, dependiendo de la actividad a realizar, puede ser...