Mi Sexy Doctora [EDITANDO]

Aceptación [Editado]

Sofía POV'S

Estaba recostada en la cama que se encontraba dentro de aquellas cuatro paredes. El silencio era abrumador, podía escuchar mis lentos latidos en compañía de mi tranquila respiración.

Estaba en total tranquilidad después de haber tomado la decisión de olvidar definitivamente a Gerardo Miller. Tomé mi móvil para llamarle a Aide, quería pasar el tiempo con ella y ver el atardecer en el mirador de mi padres.

En la llamada

Aide: Hola Mi Niña

Yo: Hola Amor

Aide: ¿Que sucede Mi niña?

Yo: Solamente llamaba para proponerte salir a dar un paseo o cualquier otra cosa que tú quieras.

Aide: Claro, me parece perfecto ¿A qué hora?

Yo: ¿Te parece si en este momento voy por ti?

Aide: Sin problemas estoy más que libre, te espero en mi casa

Yo: De acuerdo Amor, llegó en un momento

Aide: Te amo

Yo: Yo también te amo Aide y muchísimo

Fin de la llamada

Antes de terminar la llamada puede escuchar su tierna y hermosa risa que solo me hacía imaginar que posiblemente sus mejillas estaban sonrojadas y qué tenía una linda sonrisa en su rostro, pero el sonido de la puerta abriéndose repentinamente me hizo regresar a la realidad.

Me levanté rápidamente de mi cama y al hacer esto me encontré con las miradas sorprendidas de mis hermanos, estaba confundida por sus rostros pero en ese momento comprendí que era lo que sucedía y un profundo vacío se hizo presente en mi pecho.

Mis hermanos habían descubierto mi noviazgo con Aide.

Mi vista fue a dar en algún punto del suelo y ahí estaba yo, mirando fijamente las puntas de mis zapatos, miles de pensamientos se hacían presente en mi mente y mis miedos me comenzaban a abrumar.

Tenía miedo y no podía negarlo, me aterraba totalmente la reacción de mis hermanos referente a mi noviazgo, y sencillamente no podía dejar de pensar que de seguro solo podrían estar decepcionados de mi.

- Sofía... ¿Lo que escuchamos es cierto? ¿De verdad te encuentras en una relación tu nutrióloga Aide? - Preguntó Diana

La respuesta a la pregunta no podía salir de mis labios, mi miedo y mis nervios me impedían totalmente dar una contestación a aquello que mis hermanos querían saber, sentía la presencia de ellos esperándome, mi respiración antes tranquila se encontraba acelerada casi al punto de sentirme asfixiada.

- .... Si - Respondí temerosa

Mis hermanos guardaron silencio, el ambiente comenzaba a ser demasiado abrumador y las lágrimas comenzaron a salir de mis ojos mientras el silencio seguía presente. El tiempo se sentía demasiado lento y nada ocurría en aquel momento, hasta que por fin me digne a actuar para poder terminar con toda aquella situación en la que nos encontrábamos.

- ¿Están decepcionados? - Pregunté sollozando

- No - Respondió Justin firmemente

- Nunca estaríamos decepcionados de ti, ¿Entiendes? - Comentó mi hermana

Sólo pude asentir con mi cabeza, un gran peso de encima se me fue retirado y no podía dejar de sentirme bien, este era uno de mis grandes temores, que mis hermanos no me fueran a aceptar tal y como soy, pero todo resultó todo lo contrario y no podía evitar que una alegría incontrolable creciera dentro de mí.