Woman (h.s)

{From the dinning table}

Este verano ha sido uno de los mejores en toda mi vida, la cantidad de buenos recuerdos que me llevo me hincha el corazón al punto de que podría explotar de alegría. Pero lo bueno no dura para siempre, la cuenta regresiva situada en mi mente todos los días que me levanto desde esta semana resulta una tortura. Harry y yo tendremos que separarnos, romper la burbuja de esta hermosa fantasía de ensueño de verano y regresar a la realidad. Tengo que volver a mi ciudad y retomar el trabajo y mi novio tiene que viajar por el mundo para continuar con la fase dos de su tour.

Se me hunde el corazón en el pecho, el dolor que siento es tan profundo que es un dolor que me satura hasta las extremidades. Estar alejada de él es terrible, mis amigas me dijeron que las relaciones a distancia no son fáciles pero nunca me advirtieron lo mucho que me dolería.

Suspiro hundiendo mi peso sobre la tumbona, deseando con toda mi alma retrasar el final inevitable o simplemente retroceder en el tiempo.

Me sobresalto al sentir una fría y resbaladiza mano sujetarme desde el tobillo. Subo la vista y Harry está de pie frente a mí, bronceado a la perfección, solamente utilizando unos shorts azules que le cuelgan de las caderas de manera sugerente y está completamente mojado, las gotas se resbalan desde la punta de su cabello y siguen trazan caminos por sus hombros y hacia abajo.

Libero un chillido cuando se lanza hacia mí, su cuerpo cubriendo el mío, el muchacho se sacude provocando que el agua gotee de su piel a la mía y ahora estoy mojada. Harry ajusta el peso de su cuerpo sobre el mío con la idea de no aplastarme. Aprovecho la cómoda posición para amarrar mis piernas alrededor de su cintura y fundir nuestros centros. Su adorable rostro queda a centímetros del mío y como la primera vez no puedo evitar sentirme cautivada por su belleza. Mis dedos tocan sus hoyuelos y luego acaricio su mejilla.

—Gracias Harry, ahora estoy mojada—comento colocando los ojos en blancos. Aunque para ser honesta no me molesta en lo absoluto, tengo a un hermoso hombre encima de mí en busca de afecto.

—Como me gusta—responde Styles con una sonrisa radiante antes de ocultar su rostro en mi cuello y plantar una serie de besos allí.

Envuelvo mis brazos alrededor de sus hombros apretándolo más hacia mí, disfrutando la sensación de su piel y el leve olor a bronceador. Mi mano inevitablemente huye hacia la suave mata de cabello chocolate.

Nos quedamos así, disfrutando la compañía del otro, el tacto, la sensación y dejándonos mimar por este hermoso día de verano, bajo un cielo azulado intenso y un sol que constantemente broncea la piel en un sentido agradable.

Ambos nos sobresaltamos cuando mi móvil empieza a sonar, 'Kiwi' es mi tono de llamado. Suelto una carcajada mientras empiezo a bailar debajo de Harry mientras canto a todo pulmón el coro de la canción.

—I'm having your baby!—canto, frotándome el estómago.

Harry suelta una carcajada tan dulce como la miel y me coge la mano, me planta un beso allí y después desciende para repartir besos por mi estómago. Suspiro ante la agradable sensación de sus labios mientras cojo mi móvil, mi mamá me llama.

— ¿Por qué tienes 'Kiwi' como ringtone? —Pregunta con curiosidad. Lo cambié recientemente y él no tenía idea.

—Porque soy tu fan número uno Harry—me encojo de hombros—. Es mi mamá, dame un segundo.

Mi madre sólo quiere tener una charla casual, quiere saber cómo está todo entre los dos y si hemos disfrutado las vacaciones. Soy su mejor amiga y siempre me llama para contármelo todo.