Los sueños matan, ¿lo sabías?

Caída libre

...Intento de no dormir, si duermo tengo pesadillas y puedo hacer cosas horribles. Me mantengo despierta con una taza de café cada media hora, me pongo a escribir o a dibujar y camino por las noches de frío para relajar mi mente.

Pero la verdad es que no creo lograr durar estar despierta una hora más, mis ojeras están demasiado moradas y marcadas, mis piernas se agotan al caminar dos pasos y me caigo fácilmente.

Caí dormida en mi cama, los resortes se contraen y me hacen rebotar un poco, eso no importa ya que estaba descansando... ahora tengo miedo de mí misma.

Primer sueño:
Caigo y...

Estoy caminando hacia mi apartamento, acabo de salir el trabajo...me despidieron. Mi celular está sonando, es una llamada, contesto.... nadie habla, cuelgo.

Entro al edificio de 28 pisos aproximadamente, todos están muertos a mi alrededor, los cadáveres putrefactos largaban un olor al cuál muchos odiarian, para mi ya es normal.

Entro a mi apartamento y tiro mis cosas, agarro unos jeans negros, una cinta morada, unas botas de "pirata", unas vendas y mi campera.

Me desvisto. Me pongo mis vendas en mi pecho tapandolo, me pongo los jeans negros y luego las botas, me pongo la cinta alrededor de mis caderas y me pongo la campera. Lo que queda de vendas me las coloco en mi ojo izquierdo, lo perdí cuando un cristal cayó desde una gran altura.

Salgo del apartamento, tiré la llave en el piso y me dirijo hacia la azotea. Camino hasta la orilla del edificio y me siento en ella.

El atardecer y la ciudad es una hermosa y última vista. Me paro y giro, me lanzo hacia mi muerte, veo por última vez el piso.

Acabo de despertar con sudor en mi cabeza. Me duele el brazo, está sangrando, una navaja en mi mano derecha con sangre me indica de que yo misma me corte. Busque rápidamente unas vendas... no hay más. Me saco las vendas de mi pecho dejándolo desnudo, rompo un poco de la tela y cubro mis heridas y me vuelvo a poner las vendas en el pecho.