2.- El cine

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Entré a la escuela, y me diriji a mi salón. Estaban mis compañeros sentados y el profesor Jack Bendon.

-Hola...buenos días- dije con una sonrisa en mi cara.

-¡Hola señorita! Bienvenida, pase- dijo el profesor Bendon con su café en la mano.

-Gracias...-

Nos explicó que el nos daría la materia de Química. La verdad yo no se mucho sobre eso, pero tenia que poner atención.
Pasaron las horas y hasta que el timbre sonó. Salí y me diriji a los casilleros.

-¡Hola Samantha! ¿Cómo estás?- dije acercandome hacía ella.

-¡Qué tal!, bien y ¿tu?- dijo, levantando sus cejas.

-Bien...bien...me alegro que estes bien...-

-Cuentame...¿que vas a hacer hoy?- dijo

-Pues...en la tarde no tengo nada que hacer, en verdad, casi siempre estoy sola...pero podemos salir, ¿si quieres?...-

-¡Que bien, me encanta tu idea!...pero acompañame a dejar esto a la directora...Chistiane...-dijo pensando.

-Christiana Anderson-

-¡Si, si! Ella- dijo.

-Yo se donde está la oficina...si quieres te guió- dije con confianza.

-¡Si claro! La verdad es que soy nueva como lo podras notar...-

Así platicamos hasta llegar a la oficina del la directora, Christiane Anderson.

Después de clases invité a Samantha a una plaza para ir de compras, ella me dijo que si. Salimos de la escuela y entramos a la plaza. Estuvimos caminando y a la vez platicando, luego decidimos entrar al cine.

-Oye...dijo aburrida.

-¿Que pasa?-

-Y si...¿entranos al cine?- dijo entusiasmada.

-¡Oye si! Sería una muy buena idea...pero ¿cual veríamos?-

-Pues...a mi me gustaria ver una de amor...¿no?- dijo Samantha.

-Ayy no la verdad no tengo ganas de ver una de amor...mejor otra- dije malhumorada.

-Bueno pues si no quieres ver una de amor...pude ser una de...-pensativa- ¡terror! ¿no?.-

-¡Bueno, me parece bien! Una de terror- dije convencida.

Elegimos la película de The Descent. Nos formamos, compramos palomitas y golosinas, pero hubo un problema. ¡No encontrábamos los malditos boletos!

Buscamos en todas partes y no lo encontrábamos, hasta que se nos ocurrió ir a la dulceria.

-Anne...los boletos- dijo Samantha.

-¡Que! Yo no los tengo...- dije nerviosa.

-¡Que pero si tu los traias! ¿Donde los dejaste?- dijo algo alterada.

-Tu los traias...¿no es así?-

-¡Nooo! ¿Porqué los trendia yo?- dijo exclamando.

-Porque tus los traias...¡tú los compraste!-

-¡Oh! ¿en serio?...-dijo moviendo una ceja.

-¡Si, los traias tú! Bueno hay que buscarlos-

-¡Ok!...-

Llegamos a la dulceria y los boletos se encontraban justo a lado de unos ¡putos gusanos!. Fue tan estúpido que nos reimos.

En fin...entramos y mi mamá me había llamado en el cine y tenía 5 llamadas perdidas de mi mamá. Iba a morir esa noche.

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Mamá:                                                   9:14

Hija ¿donde carajos estás? Te estoy buscando y no me contestas el celular. Llámame cuando vengas.

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Samantha se fue. Llegué a mi casa y  mi mamá estaba dormida, mi hermana también y mi papá iba a llegar hasta el fin de semana.

Al siguente día me levanté tarde. Iba rumbo a la escuela, de nuevo en mi bicicleta; color café con un poco de blanco...cuando de rrepente...

Hola!! Soy Gema

Espero y les esté gustando esta pequeña historia...aún falta más chicos!!

Prometo subir el tercer capítulo.

Bye!

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⏰ Última actualización: Jun 28, 2017 ⏰

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