~4º grado~
NARRA FABIOLA
Estaba sentada en mi banca, ese día la maestra nos había sentado en herradura y me había tocado sentarme al lado de una chica peculiar pero hermosa, tenía unos cabellos de oro como los pelos del maíz 🌽 y una sonrisa tan blanca como los cheetos.
Intente leer su nombre, era muy extraño.
-A-Amella- balbuceé, en ese momento se volteó en mi dirección.
-¿Me prestas tu saca?- preguntó la rubia.
Era un momento de pánico y en el temor... le dije que no.
Tenía una cara realmente descompuesta, se veía realmente enfadada y a medias de sus gritos noté algo...
Su nombre era Amanda.
