¿A dónde vas Ema?

8 2 0
                                    

Que linda que eras

así sin más

con tu sencillez y delicadeza.

Que suave era tu andar,

flotabas entre las piedras

y que linda era tu piel

rosada y fría.

Que frágil eras,

tus ojos hinchados

parecía que llorabas

lagrimas gigantes.

Que linda era tu soledad

aunque parecía que la sufrías.

Tranquila,

sin darte cuenta

te admiraba sin hablar.

Y te vi apurada,

una flor te iba a dar.

Me quedé viéndote

avergonzada,

te diste vuelta y sonreíste.

De repente

estabas tan tranquila que asustabas,

pero en eso quedó,

no te acercaste,

ni me hablaste

como hubiese querido.

Te fuiste.

Y así,

después de un día.

no te vi jamás.

Tal vez Edén quería pazDonde viven las historias. Descúbrelo ahora