Cuando finalmente llegó al lugar, había reservado una mesa cerca de la entrada, pues así se le haría más fácil a ella encontrarlo cuando llegara. Pasaron los minutos hasta que al fin vio a una hermosa mujer asomarse por la puerta de entrada con un delicado vestido blanco hasta las rodillas, sus labios iban pintados de un color natural, al igual que sus ojos, simplemente se veía bellísima. Apenas dirigió su mirada hacia el, le hizo unas señas para que se acercara hasta la mesa, al llegar se sento frente a el regalándole una dulce sonrisa, ‘’Hola’’ le dijo con un agradable tono en su voz. ‘’Hola’’ le contestó el mirándola fijamente, pasaron unos minutos, no sabían que hacer o decir, el hecho de estar frente a una persona que habían conocido en menos de 24 horas les era algo perturbador, hasta que ella por fin decidió romper le silencio, ‘’Creo que ayer me he olvidado de preguntarte tu nombre’’, él asintió mientras tragaba un poco de agua ‘’¿Cómo te llamas?’’ le pregunto ella mirándolo fijamente a los ojos con una expectante mirada. ‘’Jack, mi nombre es Jack’’, ella se quedo observándolo unos momentos hasta que luego de unos minutos volvió a hablar ‘’Encantada, Jessie’’ dijo mientras extendía su brazo encima de la mesa, él la miro divertido y le correspondió el gesto.
Así pasaron la velada, hablaban de todo un poco, finalmente el la llevó a su casa, quedaron en verse de nuevo. Simplemente la había pasado genial, Jessie parecía ser la mujer perfecta, tenían casi los mismo gustos, claro que cada uno tenía su propia opinión sobre algún tema, pero para ser la primera vez que tenían una cita les había ido de maravilla.
Pasaron unos meses y su relación ya iba más que mejor, él la invitaba cada dos por tres al cine o a cenar, todo marchaba bien, él le había pedido ser su novia, y ella había aceptado encantada, hasta que un día algo inesperado tuvo que suceder.
En una pequeña celebración privada que se había realizado en un salón, donde se festejaba la gran venta de los automóviles en los últimos meses, y el éxito de la empresa, Jack había invitado a Jessie, ella tenía todo el derecho del mundo de participar el gran logro de su pareja, pero después de pasada la medianoche mientras había ido unos instantes hasta el tocador, al volver todo el mundo pareció caerse a pedazos. Pues había observado con sus propios ojos como su novio estaba casi ‘’pegado’’ a los abrazos y besos con una voluptuosa rubia, sus ojos se le llenaron de lágrimas, ¿Cómo pudo haberle hecho eso? ¿Tan estúpida había sido?.
Tal vez era muy obvio que eso pasaría, el era un hombre de negocios, un ‘’galán’’ como había escuchado que le decía algunas mujeres antes de que empezaran a salir, pero aun así el era su novio ¡Su novio! ¿Qué derecho tenia él de hacerle algo así? Sin poder más, salió de ahí lo más rápido que pudo, esquivando a algunas personas hasta que logró llegar a la salida, pero un brazo alcanzo a agarrarla. ‘’Jessie ¿Te sientes bien?’’ Era Ron, de todos sus amigos, él era el que más la conocía, ya que había estado en la noche en la que se conocieron y había comenzado a salir con su amiga Sasha. Ella solo pudo mirarlo con los ojos llenos de lágrimas para luego volver su vista hacia abajo, asentir con la cabeza y salir casi corriendo por la puerta.
Al me siguiente, Jack trataba y trataba de comunicarse con ella pero era en vano, nunca contestaba el teléfono, estaba cansado de dejarle como 5 mensajes de voz por día, ron le había contado que la había visto marcharse con los ojos llenos de lágrimas, cuando había decidido ir a su casa, ella solo le había abierto la puerta para gritarle durante 10 minutos de lo despreciable que era y lo idiota que había sido ella por creerle.
Y asi siguieron pasando meses días, semanas, meses. El hacia todo lo imposible por saber de ella, había ido a buscarla a su casa pero Sasha le había dicho que se había mudado y se negaba a decirle a que lugar, Jessie le había ¡Prohibido! Que le diera esa información.
Luego, Sasha, después de tratar de convencer a su amiga de que no fuera tan terca, y que le hiciera frente a Jack para que hablaran tranquila y civilizadamente, decidió ir por él, ya que estaba harta de estar cubriéndola, ella creía que por más que lo que había pasado en esa fiesta había sido un error, no podía permitir que toda la felicidad que había visto en su amiga durante todo ese tiempo que había estado junto a Jack se evaporara así de la nada.
Por su parte, Jack al enterarse que Jessie estaba a punto de tomar un vuelo hacia Europa, salió como pudo a toda velocidad desde su casa hasta al aeropuerto, su vuelo salía a las 5 p.m. y él había logrado llegar a las 4:50 p.m.
Cuando por fin logró llegar hasta donde estaba ella, esquivando a todas las personas que se le colocaban en el camino y a los policías que no dejaban que pasara hasta donde estaban los pasajeros ya listos para subir al avión, pudo confesarle lo que había sucedido de verdad. Cuando ellos se habían separados por media hora en la fiesta ya que unos colegas importantes que se encontraban en la fiesta lo habían llamado para hablar sobre algunos temas de negocios, esa mujer tan extravagante se había acercado hasta donde estaban todos esos hombres reunidos, entregándole un trago a Jack el cual contenía algo extraño que le había hecho perder la razón.
Al escuchar esto Jessie no podía creer nada de su historia, hasta que él finalmente mientras lagrimas caían del rostro de ella haciendo que toda su máscara de pintura se corriera de sus ojos, se arrodilló frente a ella, y sacó una pequeña cajita azul de terciopelo que tenía guardada desde un mes después de lo sucedido, el ya estaba preparando todo para pedirle compromiso, porque estaba seguro de que después de todo lo que había pasado sabía que ella lo amaba tanto como él la amaba a ella. Y también sabía que no quería desperdiciar un solo segundo de su vida lejos de ella, porque eso era ella para él, su vida, su alma, su razón para vivir…. Su todo.
Después de decirle todo esto, mas unas hermosas palabras declarándose frente al amor de su vida, la joven se quedo con la boca abierta al igual que todas las demás personas que se encontraban ahí para luego abrazarlo tan fuerte como se le permitía su fuerza y decirle un feliz y alegre si depositando un dulce y tierno beso en sus labios y luego dijo ‘’ Porque este maravilloso amor, merece ser unido para toda la vida y nada ni nadie podrá separarnos’’
FIN
