ojos negros...

capitulo 1

Europa

actualmente

entre a la pequeña tienda que se encontraba a el lado de un parque, ahí encontré todo lo que necesitaba, después de elegir descuidadamente mis productos me dirigía a la caja, pague y salí de ahí, camine a uno de mis lugares favoritos de ese parque, una banca en frente de un lago donde estaban los patos y los gansos, saque un paquete de galletas y las abrí para sentarme y aventarlas al agua y que los patos se acercaran, ese era mi plan hasta que alce la vista y vi que alguien mas estaba sentado, no le tome mucha importancia y decidí sentarme a un extremo, pronto empecé a lanzar las galletas y los gansos les ganaban todas las galletas a los patos mas jóvenes

-vamos, dejen un poco para los patos, ellos también quieren comer-dije con el ceño fruncido, el desconocido al lado mío rio entre dientes mostrando una pequeña sonrisa, rodé los ojos un poco molesta creyendo que se burlaba de mi, avente mas galletas lo mas lejos que pude y los gansos nadaron hacia ellas, rápidamente lance unas cerca de los patos y ellos pudieron comer

- lo lograste?- me dijo aquel desconocido, traía unos lentes negros, así que no sabia si me miraba o veía al frente

- amm que no lo estas viendo?- puede que estuviese a la defensiva por si se le ocurría burlarse otra vez de mi

- no, no lo veo- hizo una sonrisa grande, como si se aguantara la risa

no dije nada, solo recogí mis cosas y saque mi celular y escuche algo crujir, talvez algunas galletas habían caído, no me importo lo que quería hacer era salir de aquí, eh ir a mi casa

iba a paso apresurado, tome mis audífonos y puse la música al nivel mas alto, eso me relajaba, estaba cerca de un puente que cruzaba el arroyo, ya estaba oscureciendo y estaba apunto de llover, mire hacia atrás por reflejo y vi a aquel chico detrás de mi, con sus mano en los bolsillos y totalmente serio, arque una ceja y solo negué suavemente moviendo la cabeza, sabia que podía crearme falsas ideas en la cabeza algunas veces, pronto se encontraban dos caminos, una calle oscura pero podía llegar rápido a casa y una tardada e iluminada, tome la corta, ya quería librarme de las pequeñas gotas que empezaban a caer en mi rostro, me gustaba la lluvia, pero no era momento de enfermarme, por curiosidad mire hacia atrás de nuevo, y el chico ya estaba un poco mas cerca de mi, eso me puso en alerta y mi corazón empezó a latir, y mi cabeza formulaba mas preguntas

¿ me estará siguiendo? ¿Qué querrá de mi? ¿ y si es alguien malo?

la ultima oportunidad de que mi cabeza dejara esas ideas, era la próxima avenida, el seguía derecho y yo cruzaba o los dos cruzábamos, mire rápido hacia los dos lados asegurándome que no por alguna idea tonta me ocurriera algún accidente y después cruce, corrí rápido hacia la otra esquina y camine rápido, mi corazón latía y mis botas crujían al chocar con los charcos en el piso ocasionados por la fuerte lluvia que ahora era, decidí distraerme, aleje los audífonos de mi, y pensé

"debí haber traído abrigo, no solo esta pequeña playera que apenas cubre mis hombros"

pensé que mi idea de mi ropa había funcionado, pero al momento de mirar hacia atrás el chico había cruzado la avenida y estaba corriendo hacia mi, la única indicación que recibí de mi cerebro fue

corre...

y  así lo hice corrí lo mas rápido que pude, se escuchaba el sonido de mis botas y las botas de aquel chico pegar fuertemente contra el agua estancada, por alguna razón la calle se me hacia infinita y la poca luz que recibía era la de la luna, me maldije por no tomar el camino iluminado, pero eso era lo que menos debía pensar en ese momento, lo principal ahora era escapar de ese chico, un taxi paso a un poco de velocidad, decidí llamarlo como mi padre me había enseñado, silbando con los dos dedos, pero estaba tan asustada y mis dedos tan entumidos que no reaccionaban, solo temblaban

vamos carajo, reacciona!

logre que mi cuerpo respondiera y solté en gran sonido, el taxi paro en seco y me adentre rápidamente en el

señor: a donde la llevo?

-ah-ah esta dirección-le mostré mi celular y el asintió, voltee Asia atrás y aquel chico ya no  estaba

que? como? fue mi imaginación? no lo se pero eso espero

señor: señorita se encuentra bien?

- si, si muy bien- le di una sonrisa falsa y el solo siguió conduciendo

llegue a mi apartamento, podía sentir pronto el calor el  vapor de el agua caliente cayendo por mi piel, estaba por entrar pero en mis bolsillos no estaban mis llaves, sentí un toque en mi hombro y volteé rápidamente con los ojos totalmente abiertos al encontrarme nuevamente con esos lentes negros

-AAAAAAAAAAHHHHH!!!!- mi única alternativa fue gritar, estaba acorralada entre la puerta, la pared y el

-cállate!- me tapo la boca pero mordí su mano- mierda, tranquilízate!! escúchame - me dijo aun sosteniendo su mano en mi boca, respire hondo y asentí con cuidado, el retiro suave y lentamente su mano de mi boca y busco algo en su bolsillo, pensé que era un arma pero pronto saco un par de llaves, mis llaves

-m-mis llaves-las agarre rápidamente y las pegue a mi

-solo quería devolverlas- hizo una mueca con sus labios y arqueo las cejas, sus cejas eran negras, grandes y gruesas, eran hermosas en el, sus labios eran finos, su piel lechosa y su cabello negro me hizo suspirar, era alto y  fuerte por lo que me di cuenta cuando sostuvo su mano en mi boca

- y porque no solo me llamaste?- dije rodando los ojos

-lo hice pero al parecer a una persona le encanta traer los audífonos a todo volumen- sonrio burlonamente y yo forme una curva en mis labios, los dos estábamos totalmente empapados, y lo menos que podía hacer era invitarlo a casa

-quieres entrar a secarte?- dije delicadamente

-enserio?

-si-le di una sonrisa y abrí la puerta

-toma asiento iré por un par de toallas

-gracias

fui a mi habitación por un par de toallas pero antes de todo, me iba a cambiar de ropa, me cambie el pantalón y justo cuando estaba quitándome la camisa, la arroje al suelo  y el apareció en la puerta

- no mires!! enserio no mires!

-no lo are

-es enserio!

-yo no puedo mirarte- sonrió alzo los hombros

-como?

-si, yo no puedo mirarte- deslizo lentamente sus lentes negros dejando ver unos ojos completamente negros, parecían dos perlas negras, solo había dos pequeños destellos de brillo por parte de la luz de la luna, mientras que por sus hombros caían las gotas de agua que las brindaba su cabello mojado

-soy ciego- sonrió mostrando su perfecta sonrisa de dientes blancos y derechos

-n-no te creo- no podía de dejar de mirar sus ojos, eran hermosos...

-aquí esta mi tarjeta de invalido, aunque esa palabra me hace sentir mal- saco de su bolsillo su cartera y de ahí una tarjeta donde decía que era ciego

-lo lamento ense- fui interrumpida por su voz gruesa

-no por favor, no sientas lastima por mi, me caga la gente así, que cree que por ser ciego soy inútil, yo se hacer cosas que una persona que tiene todas sus facultades bien no hace- arqueo sus cejas y salió de la habitación