A veces las heridas
son tan grandes,
que son imposibles
de ocultar.
Levantarse cada mañana
luchando una batalla diferente
intentando salir adelante
con vos mismo.
Estos pedazos tirados
ya nadie los levanta
y están tan rotos
que no hay manera de juntarlos.
Mi corazón era la luna
y se fraccionó en tantas estrellas
que ya no se podían contar
¿cuantas quedaban por arreglar?
cansada de ver sus ojos tristes
decidió empezar a sonreír
pero se mentia a cada instante
para ser un rato feliz.
No lograba nada
más que un vacío eterno
donde nunca iba a salir.
ESTÁS LEYENDO
Corazones rotos
Non-FictionNo es nada interesante saber la vida de los demás, pero yo te cuento como pienso, que me gusta y como soy. Capaz es bueno conocer a alguien más, no lo sé.