"Heather POV's"
La campana sonó anunciando el cambio de clase, todos se movían de un lado a otro....menos Heather, su nueva escuela era más grande que la anterior, mucho más.
Arriesgándose a perderse para siempre en ella, caminó entre los estudiantes tratando de no chocar con ninguno, lamentablemente su estatura no le ayudaba mucho pues solo veía mochilas y cuadernos por todos lados.
Segundos después de empujones, pisadas y alboroto, nadie quedaba en el largo pasillo, a excepción de la castaña. Se apresuro a llegar hasta su clase preguntándole a varias personas de intendencia, que fueron sus ángeles en ese momento.
Salón 241-C
Leyó mentalmente Heather las letras de metal que adornaban aquella puerta roja la cual estaba abierta indicando que la clase aun no comenzaba.
Agradecida con la vida entro al salón ignorando los pocos murmullos que se dirigían hasta ella. Ella buscando con la mirada un asiento vacío lo encontró aún lado de un chico de pelo castaño que estaba sumergido en su celular.
"No le importará" pensó Heather, dirigiéndose hasta el asiento que estaba en medio de todos.
Colocando su mochila en la mesa tomó asiento juntó al chico, haciendo que este se irguiera rápidamente, bloqueando el celular y guardándolo en el bolsillo de su pantalón.
—Hola....—se atrevió a decir.
Sin respuesta.
—Soy nueva—insistió, pero de nuevo no hubo respuesta— ¿no hablas mucho o simplemente me odias por sentarme a tu lado?.
El contrario se resistía a contestarle. Rendida dirigió su mirada hasta el frente, dándose cuenta que el salón estaba en silencio y la mayoría de las miradas eran para ella y el callado chico.
Al fondo del salón se escucho el grito de una chica gritar "Ni lo intentes", haciendo que algunos estallaran en risas. Por obvias razones Heather no entendía nada.
Iba a preguntar que es lo que estaba pasando, pero la voz del profesor la interrumpió de inmediato.
"Y por favor hagan la tarea, no quiero reprobar a nadie este semestre" finalizó el profesor en cuanto escucho la campana sonar.
La castaña sintió como arrastraban la silla aun lado suyo, lo que indicaba que el castaño se había retirado mas rápido que un rayo.
Recargada en la pared de afuera del salón espero aproximadamente cinco minutos, hasta que la rubia que gritó que no lo intentara saliera de este, en cuanto lo hizo Heather le tocó el hombro haciendo que la chica que era rubia se acercara.
— ¿qué pasa chica nueva?— habló animada la contraria.
—Mi nombre es Heather, y solo quería preguntarte sobre el chico que se sentó junto a mi. ¿Por qué gritaste que no lo intentara?
—Y yo Julieta, bienvenida y lo dije porque es Justin, obviamente.
Con que el chico tenía nombre y era Justin.
— ¿A qué te refieres?, tú lo dijiste soy nueva y no entiendo— ajusto su mochila bien a su hombro, mirándola intrigada.
—Cielo, es cierto. Lo único que puedo decir, es que nadie sabe nada de él, mas que su nombre y apellido. Nunca habla con nadie, se pierde al finalizar las clases, no sabemos mas — hizo una pausa mirando ambos lados del pasillo—Todos tratamos de hablar con él, pero nunca dice nada, solo con los profesores y eso si es de suma importancia.
Finalizó con una mueca en el rostro, al parecer realmente nadie sabia nada de ese chico. Se despidió de Heather con la mano, regresando con su grupo de amigas.
(*)
Andando en bicicleta de regreso a su casa ella no dejaba de pensar en el como actuaba Julieta, es decir, hubo un momento donde giro la cabeza para ver si alguien nos escuchara como si fuera un delito.
El sonido de un claxon causo que ella se sobresaltara y se pusiera en marcha hasta cruzar por completo la calle y llegar a su casa, dejando la bicicleta en el pasto se adentro en su casa.
—¡Volví!— gritó al cruzar la puerta principal. Nadie respondió.
"¿A todos les da por no hablar ahora?", reviso la hora en el reloj de la sala y su pregunta tuvo respuesta, eran las 4:30pm, nadie había llegado aún.
Decidida tomo la laptop, iniciando una llamada por skype con su única y mas grande amiga; Callie.
—Bien, te dije que no me llamaras si no es para contarme que conociste a tu principe azul —respondió la pelirroja al otro lado de la pantalla, mordiendo una dona.
Heather soltó una risa.
—No es mi príncipe azul, pero es alguien demasiado curioso....y callado. La verdad es que no sé porque estoy tan interesada, solo es alguien que no habla.
— ¿es mudo?— preguntó su amiga.
—No, bueno, no sé. Una chica dijo que nunca nadie había escuchado su voz , solo los profesores.
—¿le intentaste hablar, entonces?
—Sí, pero no obtuve alguna respuesta.
Solo escuchó como su amiga se carcajeaba al otro lado. Casi atragantándose con la dona.
—Debiste verte tan graciosa hablando sola.
—¡Estúpida!, esto es serio.
—¿por qué seria algo serio?, solo es un chico que no quiso hablarte, y ya. No es como si lo conocieras de toda la vida, así que por favor déjalo pasar.
—No me importa, yo voy a lograr que me dirija la palabra, no me importa. Me vopy porque acabo de llegar y quiero comer, adiosito.
— No te atrevas a colgarme Heat...
Y cortó.
Lo siento Justin, te topaste con Heather Hamilton, y yo no me quedo con dudas.
(*)
Voten, comenten y recomienden, ah.
muchas gracias por las personas que la están leyendo, las quiero.
- m.
ESTÁS LEYENDO
"At school" - j.b
Fanfiction"No mensajes, no llamadas y no cartas. No vas a buscarme y no vas a dirigirme la palabra si no es en la escuela"