1- El encuentro perdido

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La vida siempre me ha dado igual, se que algún día he de morir, solo espero que eso ocurra pronto, no tengo aspiraciones a pesar de haber concluido una carrera, me dedico al oficio mas viejo que existe... Animar a ebrios, infieles, patanes y mujeres falsas e interesadas en bares y restaurantes.

En el amor no me puedo quejar tengo el amor de mi perro, y de mi mejor amiga Fanny, mi familia me repudia pero esa es otra historia y en el ambito sexual nunca en mi vida habia disfrutado tanto el sexo con mis dedos. Lo que importa aquí es que mi vida nunca había sido tan hermosa desde que conocí a ese idiota en esa presentación en el bar The Beer House en New York.

Como olvidar esa noche, todo iba tan bien, la fiesta, el alcohol y sobre todo mi presentación fue un éxito recuerdo que me pagaron muy bien, normalmente cobro 50 dolares por hora, ¿Que cuantas horas tuve que Aguantar? Nada más ni nada menos que 2 horas continuas, sin descansos ¿Sabes lo atrofiada que termino mi garganta?, empecé a hablar como Gollum después de esa noche.

Pero eso no fue lo único que paso, fue esa noche donde lo conocí... En ese maldito Bar. Tratare ser de lo mas detallada en contarlo lo prometo.

Recuerdo que después de mi presentación el Bar Man me felicitó y me invito unos tragos...

- Felicidades Colins estuviste muy bien allá arriba, sin duda los vuelves locos con tu voz- limpia una copa con un trapo blanco y lo coloca en la barra- imagino que quieres un trago después de haber cantado tanto-

- Gracias en verdad es un alago, supones bien, creo que mi garganta se merece una botella-

El solo río y sirvió una copa del mejor Whisky del Bar.

- Esta va por mi cuenta Colins- me miro con una sonrisa mientras servía la copa-

Su mirada fue un tanto perversa que logro darme miedo, pues el hecho de que un Bar Man te sirva una copa solo significa una cosa... Quiere acostarse contigo. Yo solo le agradecí su amabilidad mientras tomaba el Whisky veía a todos lados, no pude evitar pensar en el asco que me daba ver a toda esa gente bailando abrazados, besándose y conocer lo que pasaría al terminar su estancia aquí.

-Colins, Colins- me toca el hombro para llamar mi atención

-¿Que sucede?- pregunte desconcertada

- El Jefe te llama- al decirme eso el se ocupa de atender a otros clientes

- Oh muchas gracias y ¿Muchas gracias por el trago?- tome el resto de mi trago de golpe

-Alex, me llamo Alex- contestó un poco enfadado

-¡Claro! Por su puesto Alex, bueno muchas gracias de todos modos-

Subí por las escaleras del bar, arriba estaba la planta VIP y la oficina del Jefe que por cierto era el Bar mas caro de todos en los que me había presentado. Caminé hasta la oficina del Jefe. La puerta era de madera muy lujosa, con detalles espectaculares, toque la puerta con inseguridad.

-Adelante, pasa - dijo con voz grave-

Abro la puerta poco a poco y lo primero que veo al Jefe con dos chicas, una a cada lado, su oficina es enorme, las paredes estaban llenas de fotos del Bar con diferentes artistas de calibre. frente a mi se encontraba un asiento bastante comodo, fue cuando me acerque un poco mas.

En cuanto a el, portaba un traje negro con rayas grisáceas, camisa blanca y traía con el unas gafas oscuras, frente a el estaba una mesa del mismo tipo de madera que la puerta rodeada por los costados de sillones muy lujosos de piel color negro,
En cuanto lo vi trague mi saliva, me dio un poco de miedo, pues es un tipo de piel morena, alto de aproximadamente 1.90 de estatura yo era una pulga a su lado.

-¿Me llamaba señor?- pongo mis manos entrelazadas a la altura de mi abdomen, me sentí un poco nerviosa.

-Si, Colins toma asiento- tomo su dinero de la bolsa de su camisa- estuviste muy bien Colins los animaste a todos, cantaron junto contigo. Me fascinaste con tu voz y valla que he tenido a grandes artistas.- río tocándose la barbilla- hablemos sobre tu pago ¿Cuanto me cobrarás?

- cobro 50 dolares por hora asi que son 100 dólares señor - conteste de golpe pues tenia ganas de irme a casa

-¡¿100 dólares?! Jajajajaja ¿Es una broma cierto?- río como si le hubiese contado el chiste más gracioso de la historia.

-¿ Le parecen bien 75?- pregunte algo molesta.

- No puedo darte 100 dolares ni mucho menos 75 dolares- dijo estabilizando su risa- no puedo darte menos de 1000 dolares me ofendería

Yo no supe que decir, quede impactada nunca me habían ofrecido tanto por 2 horas de presentación y no tuve que traer ninguna clase de instrumento conmigo

- Entonces usted ponga el precio - tartamudeo-

-Te daré 2000 dolares, en verdad me encanto tu voz, para ser una cantante de bar en bar cantas muy bien- dijo mientras me daba el dinero.

Yo solo pronuncie un gracias por todo, quede impactada y estaba un poco emocionada, pues jamas había recibido tanto dinero por cantar.

Pero aun no les cuento lo verdaderamente importante como fue que lo conocí a el...

Eran apenas la 1:00 am yo por su puesto estaba demasiado ebria en la barra, gaste 500 dólares en tragos, apenas podía sostenerme, fue en ese preciso momento que voltee hacia la entrada del bar. De repente toda esa gente se volvió invisible todo lo que ocupaba mi campo de visión era el, pensé que era una alucinación mía por el exceso de alcohol.

De estatura aproximadamente 1.80, tez blanca, cabello negro no era muy delgado, digamos que estaba en un termino medio y en su rostro los ojos cafés mas ardientes que he visto, vestía un pantalón de mezclilla negro, una chaqueta del mismo tipo y color, zapatos blancos y para rematar una boina blanca también.

Se veía ridículo pero no tuve tiempo de darme cuenta, me perdí en sus ojos.

Se acerco a la barra yo me voltee rápidamente para evitar que me viera no estaba en posición de conquistar a nadie, ebria y apestando alcohol.

-Dame un trago de jugo de arándano por favor- tomó asiento

No pude evitar reírme escupiendo un poco de mi trago

- ¡Que chico tan rudo- dije bebiendo de mi trago...mi último trago al menos de mi dinero.

-¿Te crees muy ruda bebiendo Whisky? Bebe algo de tequila eso es ser rudo- el solo me miro de reojo, tomando lentamente su jugo de arándano

Si hay algo que los hombres no deben hacer es retar a una mujer y menos cuando esta ebria.

- ¿Y si lo tomo que?- contesté con mis manos en la cintura

-Entonces podrás burlarte de mi todo lo que quieras- el seguía mirándome como si en mi hubiese algo que le divirtiera

- Me parece bien, oye Alex ¿Tienes algo de tequila?- recargue mis brazos sobre la barra.- Te arrepentirás de haberme retado -

-Si claro - respondió sarcástico

- Aqui tienes Colins -

Justo cuando iba a apagar el intervino

-No te preocupes, yo pago este trago, será divertido - dijo entre risas

En ese momento sentí mucho miedo, jamas había tomado tequila y según las malas lenguas era muy fuerte y horrible pero en ese instante no pensé en eso.

Tome como si fuera agua aquel trago de tequila, el me miro espantado y yo a el con cara retadora

-¡Oye tranquila el tequila es muy fuerte si no lo acompañas con nada, debes tomarlo poco a poco!- me miro sorprendido

Era verdad, era muy fuerte rápidamente sentí como raspaba mi garganta y comenzaba a hervir mi estómago después de unos instantes paso algo de lo que aun me siento muy avergonzada.

-¡Oooh dios mio mis zapatos!...

Ojala Nunca Te Hubieras IdoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora