¿Dónde está mamá?

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De pronto, empiezo a sentir mucho frío, no podía abrir mis ojitos. Siento que alguien me limpia a lambidazos.
—Tranquilo hijo mío, soy tu  madre y estoy para cuidarte.
—¿Mamá?—dije con un ladrido
—Sí, querido. Debes alimentarte, tus hermanos no te dejarán  nada de leche.
Dando  empujones entre  mis comelones hermanos, tratando  de adivinar donde estará  la fuente de leche, pude encontrarla  y alimentarme. Mamá  siempre se aseguraba de que estemos juntos y no pasemos frío. En corto tiempo, la logre amar con mi corazoncito.
Ya  tengo dos meses de edad, veo gente alrededor de la caja en la que estamos. Un hombre me alza, huele muy bien, lo saludo con un lengüetazo en su nariz. Él  sólo  ríe y no entiendo qué  pasa.
—Hijo, serás  feliz ¡Cuídate  mucho! —mamá  se despedía  de mí.
De a poco fui alejándome de mi hogar, mi madre y mis hermanos en una caja con ruedas que iba muy rápido (un auto).
—Pequeño, ésta  será tu casa. Te cuidaré  y mimaré mucho. Yo soy Ethan— dijo mi nuevo amo.
—¿Dónde  está  mamá?—dije ladrando, mas Ethan no me entendía.
Él  me colocó  sobre un cojín  y dijo que durmiera. Yo no podía porque extrañaba a mamá  y a mis hermanos. ¡No pude evitar llorar, me sentía tan solito!  Repentinamente, aparece otra vez Ethan, me alza y lleva a su cama. Aquí, parece muy suavecito y cómodo. Mi nuevo amo me abraza, éso  me hace sentir seguro y el sueño empieza a vencerme.
—Duerme Coquito —luego cerró  los ojos mi nuevo amo.
Al parecer, mi nombre será  Coquito, me encanta.

Soy más  que un GUAU GUAU Donde viven las historias. Descúbrelo ahora