No sé en qué momento las lágrimas corrieron por mis mejillas, no podía describir el sentimiento por qué era una mezcla de coraje, rabia, decepción, tristeza, me había rendido, esa era la principal razón, me sentía tan vacía que lo único que quería hacer en ese momento era desaparecer solo encontrarme en silencio, sola llorando como siempre a sido, no tenía a nadie en ese momento para que me abrazara y me susurra que todo iba a estar bien que aunque me encontrara hecha pedazos, saldría adelante, una pequeña mentira que ambos creeríamos pero calmaría mi llanto, pero no había nadie me encontraba sola, en medio de mis problemas siendo atacada, esperando a que mi resistencia se acabará, y así fue, la esperanza se había acabado deje que me destruyeran una vez más, pero por primera vez disfrute de mi dolor por qué sabía que era la última vez que me mostraría débil, era la última vez que lograrían destruirme por qué una tercera seré yo quien los destruya, pues del todo el dolor viene la mejor parte.
-A.R