But that's all I wanna do Right Now

[Get close to you. I]

Deuz no le quitaba la mirada de encima, cosa que no notaba por estar medio adormilado. Loon se había levantado del sofá con un bostezo, mirando al moreno a su lado, sin ganas de descifrar la expresión que llevaba en el rostro por mera pereza

Las tardes frías y lluviosas eran sus favoritas, porque podía dormir todo el día en el sofá con Deuz sin que éste opusiera resistencia. Normalmente, si el día era soleado, el líder de los Nightmares lo obligaba a salir a algún lugar, no importaba a donde. Pero como no podían ir a ningún lado -no si no querían empaparse-, el mayor simplemente se acurrucaba contra él como si fuera un oso a punto de hibernar 

Se dejó caer en el torso del moreno, sintiendo una calidez en el pecho que lo dejaba atontado. Aquella sensación se intensificó cuando Deuz comenzó a acariciarle el cabello

—¿Por qué llevas puesto mi suéter, mocoso? —Loon en realidad no escuchó esas palabras, se relajó más al escuchar cómo su pecho vibraba con cada palabra. Al notar que no le estaba prestando atención, le dio un tic en el ojo y jaló su cabello con cierta brusquedad

—¿Que quieres~? —se quejó enseguida, soltando quejidos de molestia y fingidos sollozos   

—¿Por qué llevas mi suéter? —repitió sin importarle

Loon entonces se vio un brazo, dándose cuenta que esa no era su ropa. ¿Cuándo había sucedido?

—A-Ah... —soltó avergonzado—¡Lo siento...!  —exclamó levantándose de nuevo, bruscamente y sentándose en el estómago del otro dispuesto a sacarse la prenda 

—Oye no te muevas demasia-   —gruñó Deuz, deteniéndose al ver que, de alguna manera, el menor se había enredado su suéter con los brazos hacia arriba y no podía liberarse

Hubiera empezado a reír tan estruendoso como siempre, si no fuera por la vista que tenía delante. Tragó duro cuando la pancita del otro quedó al aire, pues su camisa se había levantado junto a la otra prenda. Era tentador...

—¿De-Deuz...? ¿Que hac-haces...?  

Su rostro comenzó a tomar color cuando sintió las manos del otro apenas acariciando su piel, a lo que soltó un chillido por lo frías que estaban y la sensación tan extraña. Aunque no duró demasiado, pues justo dos segundos después el otro le había quitado el suéter y ahora lo atacaba -con nula delicadeza- con cosquillas

Soltaba carcajadas mezcladas con lloriqueos y amenazas para nada creíbles. Deuz no se rendía, y no paró hasta que Loon le gritó "¡Me voy a hacer pipí baka!". Con una sonrisa burlona se detuvo, a punto de reírse cruelmente del otro al ver sus ojos llorosos y rostro rojo por no poder respirar correctamente

—¿Te... Te diviertes...? —preguntó con la respiración entrecortada, frunciendo el ceño

—Como no tienes idea —respondió aguantando la risa

—Eres a-do-ra-ble~ —deletreó las sílabas de esa frase para burlarse más. Soltó una risita ronca ante el puchero de Loon

—Quítate de encima —ordenó desviando la mirada, ciertamente humillado

—Oblígame —lo retó

Los ojos del heterocromático estaban expuestos, dándole una vista espectacular a Deuz. Negando con la cabeza, simplemente se volvió a tumbar en el sillón, siendo su turno de estar sobre su pareja

Si antes había parecido un oso hibernando, ahora era un enorme perro en busca de atención. Un perro quizás no, un lobo le parecía más adecuado. Casi se imaginó unas orejas sobre su cabeza mientras acariciaba su cabello y una cola en su espalda baja demostrando la felicidad ante sus caricias